Amaicheñas no llegan a Tafí y dan a luz en la ambulancia

A las demoras para llegar hasta Amaicha por el mal estado de la ruta 307, lo hace que muchos turistas esquiven llegar hasta este pueblo con “el mejor clima del mundo”, como dice su slogan, se adosan problemas más delicados como el traslado de personas accidentadas o mujeres a punto de parir, ya que Amaicha solo cuenta con un Centro de Atención Primaria de la Salud (CAPS) y no está preparado para partos.

El enfermero José Mamaní ya no se acuerda de cuántos partos asistió en Amaicha. Lo que sí sabe es que, cuando las parturientas se presentan en el CAPS, muy probablemente darán a luz en la ambulancia. “Nosotros las trasladamos, pero sabemos que muy probablemente van a parir en el camino. Llegan acá con 6 de dilatación y como no tenemos sala de parto en Amaicha, sí o sí hay que llevarlas o a Santa María, o a Cafayate o a Tafí. A todos esos lados la ruta está en pésimo estado. Y a Tafí, cuando podríamos demorar 40 minutos, demoramos 1.40 hora. No llegan”, cuenta el emergentólogo y en su cara se puede ver la ternura de haber traído al mundo a varios bebés, aunque sea a 50 km/h arriba de la ambulancia.

Pero ese no es el mayor problema de una ruta sembrada de baches y de peligros latentes. El problema en serio se lo llevan los pacientes que han sufrido golpes severos y que necesitan traslado urgente al hospital de Tafí del Valle. Según Mamaní, “la hora de oro” que hay entre que un paciente se accidenta y consigue asistencia para tratar las lesiones, en Amaicha, y por el estado de la ruta, puede extenderse una hora más. “La mayoría de los pacientes que asistimos son traumatizados, por accidentes o, más todavía, porque se de desbarrancan en la montaña cuando andan con los animales. Es gente que termina muy golpeada y en el CAPS o en la ambulancia le damos los primeros auxilios, pero sí o sí hay que trasladarlos a Tafí. A veces llegan peor, los pobres, porque uno en la ruta anda a los tumbos. El paciente traumatizado llega nervioso, no se lo puede tranquilizar ni estabilizar, y el profesional que acompaña llega igual. El objetivo es siempre aliviarle el dolor a la persona traumatizada hasta llegar al centro de mayor complejidad, pero así es imposible calmarle el dolor”, explica el enfermero, referente del 107 en el CAPS de Amaicha y agrega que de poco sirve la experiencia de los choferes de ambulancia: “ellos podrían andar por la ruta a 100 o a 120 km/h, son expertos en esto, pero no pueden pasar de 50 km/h por el estado del camino”, explicó.