24 Noviembre 2016
PROMESAS. Yenadei y Jerez son dos de los pibes que prometen en el “Santo”. la gaceta / foto de antonio ferroni
No festejaba desde el 26 de junio, cuando marcó dos tantos para que San Martín derrote a Unión Aconquija por el Federal A y consiga el ansiado ascenso. Pasaron casi cinco meses. Demasiado para un delantero que vive del gol. Anoche, Ramón Lentini se dio el gusto de volver a marcar y lo celebró sacándose la camiseta “albirroja”. “Desde hace mucho tiempo que estaba esperando este momento. Fue un desahogo tremendo ver que le pelota ingresaba al arco y de esa forma se cortaba mi racha negativa”, reconoció el “Tanque”.
Las lesiones fueron una constante en estos meses para el futbolista que jugó en Estudiantes de La Plata y otros clubes. Primero se desgarró y luego sufrió un esguince en el tobillo derecho. “Las lesiones no me permitieron tener la regularidad que esperaba. Siempre me cargué de paciencia. Sabía que este presente, tarde o temprano, iba a llegar. Hubo momentos en el que me daba mucha bronca no poder recuperarme dentro de los plazos esperados. Gracias a Dios esto ya comenzó a ser parte del pasado”, indicó.
Lentini sabe muy bien que los jugadores están expuestos a lesiones. “Ya me pasó en otros momentos de mi carrera y nunca me desesperé. Siempre esperé con mucho optimismo, como lo hice en esta oportunidad. El apoyo de mis compañeros y del cuerpo técnico fue fundamental”, comentó el atacante, que le dedicó el gol a su familia. “Es para ellos, que siempre buscaron levantarme el ánimo cuando estaba triste por las lesiones. Sin el apoyo de mi familia, todo se iba a complicar mucho más”, agregó.
El goleador se ilusiona con que San Martín comience a dar pelea en los primeros lugares. “Contra Boca Unidos demostramos que el trabajo semanal está empezando a dar sus frutos. Le ganamos muy bien a un adversario complicado. Tenemos que seguir por este camino”, añadió.
“Ahora hay que pensar en lo que se viene. Independiente Rivadavia será un rival difícil, porque está complicado con el descenso. Espero seguir contribuyendo para que San Martín adquiera el protagonismo que los hinchas piden y que realmente se merece”, concluyó.
Las lesiones fueron una constante en estos meses para el futbolista que jugó en Estudiantes de La Plata y otros clubes. Primero se desgarró y luego sufrió un esguince en el tobillo derecho. “Las lesiones no me permitieron tener la regularidad que esperaba. Siempre me cargué de paciencia. Sabía que este presente, tarde o temprano, iba a llegar. Hubo momentos en el que me daba mucha bronca no poder recuperarme dentro de los plazos esperados. Gracias a Dios esto ya comenzó a ser parte del pasado”, indicó.
Lentini sabe muy bien que los jugadores están expuestos a lesiones. “Ya me pasó en otros momentos de mi carrera y nunca me desesperé. Siempre esperé con mucho optimismo, como lo hice en esta oportunidad. El apoyo de mis compañeros y del cuerpo técnico fue fundamental”, comentó el atacante, que le dedicó el gol a su familia. “Es para ellos, que siempre buscaron levantarme el ánimo cuando estaba triste por las lesiones. Sin el apoyo de mi familia, todo se iba a complicar mucho más”, agregó.
El goleador se ilusiona con que San Martín comience a dar pelea en los primeros lugares. “Contra Boca Unidos demostramos que el trabajo semanal está empezando a dar sus frutos. Le ganamos muy bien a un adversario complicado. Tenemos que seguir por este camino”, añadió.
“Ahora hay que pensar en lo que se viene. Independiente Rivadavia será un rival difícil, porque está complicado con el descenso. Espero seguir contribuyendo para que San Martín adquiera el protagonismo que los hinchas piden y que realmente se merece”, concluyó.
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