"La Pasión de Cristo", el filme de Mel Gibson que desató una gran polémica en todo el mundo, llegará hoy a los cines tucumanos.
La película, que no hallaba distribuidor, viene acompañada no sólo de múltiples críticas (a favor y en contra), sino también de un impresionante despliegue de marketing, que incluye la banda de sonido y hasta la venta de las réplicas de los clavos usados durante el rodaje.
"La Pasión de Cristo" es una vívida narración de las últimas doce horas de la vida de Jesucristo. Alrededor del año 30, en la provincia romana de Palestina, un misterioso carpintero judío llamado Jesús de Nazareth comienza a enseñar públicamente y a anunciar la llegada del reino de Dios. Durante siglos, el pueblo judío había esperado la aparición del prometido libertador conocido como el Mesías -un personaje que les devolvería su antigua dignidad, y los liberaría de todo mal y sufrimiento.
En las mentes de muchos, Jesús parecía ser el Mesías. Rodeado de un grupo central de doce discípulos, Jesús comienza a atraer a una multitud masiva de seguidores de los pueblos de Galilea y Judea, quienes lo alabarán. Al mismo tiempo, Jesús tenía también muchos enemigos en Jerusalén. El Sanedrín, el consejo de gobierno compuesto por los sacerdotes judíos y los fariseos más influyentes, conspira para condenar a Jesús a la muerte.
Con la ayuda de Judas Iscariote, un miembro del círculo íntimo de Jesús, el Sanedrín logra arrestar a Jesús, entregándolo a las autoridades seculares romanas acusándolo sin fundamento de traición contra Roma. Aunque Jesús les explica que su reino es celestial y espiritual, el procurador romano Poncio Pilatos, enfrentado con la posibilidad de un motín, ordena expulsar a Jesús de la ciudad para ser crucificado.
Antisemita o respetuosa, fiel a la historia o manipuladora, sádica o realista. Todas estas opiniones contrapuestas despertó el estreno de "La Pasión de Cristo" en otras latitudes. Ahora llegó para sacudir a Tucumán.
En Tucumán ya circulan copias piratas del filme
El rotundo éxito de taquilla registrado por la película de Mel Gibson, "La Pasión de Cristo", despertó el interés de los comerciantes de copias pirata, que ya las están vendiendo en Estados Unidos. Varias de ellas incluso llegaron a la Argentina. Y, los primeros en verlas, fueron los clérigos. Hasta en Tucumán circulan algunas copias, la mayoría bajadas de Internet, que ya fueron vistas por distintos grupos religiosos.
Según publica en su edición de ayer el diario "La Prensa", desde su estreno en Estados Unidos, hace casi un mes, el filme recaudó mas de 250 millones de dólares en la taquilla. La película de Gibson, cuya producción costó unos 25 millones de dólares y fue estrenada el pasado 25 de febrero en EEUU, salió a la venta en el mercado negro casi al mismo tiempo. Esto fue lo que motivó que el estreno en la Argentina sea adelantado una semana.
Según el rotativo, numerosas personas compraron una copia pirata de la película que se ofrece de mano en mano y boca en boca en las estaciones de subterráneo y en algunas calles de Nueva York, durante las horas de mayor circulación. La versión pirata de "La Pasión de Cristo" es ofrecida en formato VHS, por cinco dólares, y como DVD, por ocho dólares.
Religión y negocios
CONSERVADOR.- Ferviente católico, Mel Gibson es un tradicionalista que se manifiesta a favor de la misa en latín, se abstiene de comer carne los viernes y adhiere a una interpretación estricta de la doctrina de la Iglesia. También se opone al aborto (tiene 7 hijos) y al divorcio.
UNA SEÑAL.- Para hacer su película -cuya realización, según Gibson, le fue inspirada por una señal divina- el actor de "Arma mortal" se basó en los cuatro Evangelios (Mateo, Marcos, Lucas y Juan) y, según un informe de la revista "Newsweek", en las visiones de dos monjas: la española María de Agreda (1602-1665) y la francesa Anne Emmerich (1774-1824). Ambas experimentaron los estigmas de Cristo. Los testimonios de estas mujeres incluían alusiones a una supuesta responsabilidad de los judíos en la muerte de Cristo.
UN EXCELENTE NEGOCIO.- El escándalo que generó la película (que fue acusada de antisemita) se convirtió en una excelente campaña de marketing. A pesar de las críticas, en su mayoría desfavorables, le aseguró al filme un récord de taquilla.
CUSTODIOS.- Pero la gran polémica que desató "La Pasión de Cristo", provocó algunos problemas para Mel Gibson y para Jim Caviezel, el actor que personifica a Jesús. Ambos sufrieron amenazas de muerte y deben salir sólo con una fuerte custodia.