RÍO DE JANERIO, Brasil.- El fondista británico
Mo Farah magnificó hoy su brillante carrera deportiva al revalidar su título de campeón olímpico de los 10.000 metros en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro con una sensacional carrera y un final espectacular.
Sobre la pista del Estadio Olímpico de la ciudad brasileña, el corredor de origen somalí conquistó el oro en 27:05,17 minutos, por delante del keniano
Paul Tanui, que se colgó la plata en 27:05,64. El bronce fue para el etíope
Tamirat Tola en 27:06,26.
Flamante bicampeón de los 10.000 y de los 5.000 metros en Londres 2012, los Juegos de su país, Farah dio el primer paso para repetir aquella gesta con una actuación de lo más inteligente, siempre en grupo de cabeza, pero reservando fuerzas para la vuelta final, en la que libró la verdadera batalla con Tanui, al que superó de manera excelsa en la recta de meta.
El próximo sábado, en la última jornada del atletismo en el Engenhao, el vigente campeón mundial de los 10.000 metros buscará el doblete en el 5.000.
Pero lo consiga o no, Farah ya escribió otro capítulo dorado en la historia del atletismo. A sus 33 años, añadió otro oro al "doble-triple" que firmó al conquistar las dos distancias largas de la pista en unos Juegos (Londres 2012) y en dos Mundiales consecutivos. Fue el primer fondista que lo consiguió.