Cartas de lectores

Día del animal

Con motivo del próximo Día del Animal, algunas maestras ya estarán pensando el tema “Mi animal preferido”, para que los alumnos se luzcan con una linda composición. Fácil es imaginar que el perro se llevará las palmas. Y también es fácil imaginar que ningún chico lo elegirá al pobre chancho. Ni siquiera -y eso es triste- el hijo de un chanchero. Pasa que este animalito siempre ha tenido “mala prensa”. Muchos refranes lo desmerecen. El más conocido es “chancho limpio nunca engorda”. Pero la verdad sea dicha: ese refrán ha perdido vigencia; hoy los criaderos de chanchos son tan asépticos como un quirófano. Sí, chanchos “chanchos” eran los de antes. En el “Refranero de uso argentino”, de Pedro L. Barcia y G. Pauer (Emecé, 2013), hay más de 30 refranes en la entrada “chancho”. Uno que otro lo valora, como este: “Hasta del chancho se aprende, nadie le enseña a rumbear”. Al respecto, he leído que el naturalista Guillermo E. Hudson alaba su inteligencia. ¿Puede el chancho ser mascota? Pues claro que sí. Como todo animal pequeño, los lechoncitos son adorables, suaves, enternecen. Alguna vez leí el caso de una mujer que crió un cochinillo en su departamento. Tiempo después tenía la compañía de una bestia de casi 200 kilos. Y conozco de primera mano este simpático caso con un dramático final. Un señor lleva a la casa un lechoncito para futuro alimento de la familia. Aunque el animalito ya comía, sus hijas le daban la mamadera, lo vestían con ropas de muñecas, y el muy mimoso dormía en la cunita de una muñeca. Las seguía como un perrito. Pero se hizo grande, el padre lo carneó y lo cocinó. Y bien. Las hijas no quisieron comer la carne de su querida mascota. Y hablando de comer. No hace mucho tiempo, se divulgó -de sorpresiva manera- que la carne de cerdo tiene efectos afrodisíacos. Viene al caso pues traer a colación que, según el viajero Iván de Pineda, en Burdeos, una vez al año, se le rinde homenaje al chancho en la fiesta “Tue Cochon” (Chancho muerto), de origen campesino, y se celebran las virtudes del cerdo y lo que significa para la vida y la dieta de esa región de Francia. Por algo será. Una expresión muy original se usa cuando a alguien que está pidiendo mucho le decimos: ¡pero vos querés la chancha y los veinte! Y como hay gente “pechadora”, lo máximo es pretender la chancha, los veinte... ¡y la máquina de hacer chorizos! Y hablando de chanchas. Una especial mención se merece la mamá chancha. Es admirable. Amamanta a sus bebitos durante cinco minutos una vez cada hora. Para tal fin, se acuesta de costado y exhibe su vientre, llamando con gruñidos a sus pequeñuelos durante un minuto. Luego, otros gruñidos mediante, ellos comienzan la succión. Cuando termina el flujo de leche gruñe en forma más lenta como calmando a las crías, se para y esconde el vientre, dando por terminada la sesión. Estas observaciones fueron realizadas por un estudioso norteamericano que inventó una “chancha robótica” para los criaderos (aparecidas en este diario en un interesante artículo sobre tal invento; 7/4/1991, página 4, 3º Sección). Cada lechón en su teta es el modo de mamar, dice sabiamente el viejo Vizcacha. El robot tiene tetas para todos. Lo curioso del caso es esto: los lechones no desarrollan conductas agresivas pues no se pelean y no quedan con hambre. Así pues, chanchos limpios y tranquilos. Avances tecnológicos “del campo” que le dicen. Ah, dicho artículo tiene una simpática ilustración del dibujante Ricardo Heredia.

José A. Santillán
Lizondo Borda 1.137

San Miguel de Tucumán

Ruta Tafí-Amaicha del Valle

No por repetido deja de ser cierto. La ruta entre Tafí del Valle y Amaicha del Valle está en condiciones deplorables. Es una vía muy transitada porque hasta los habitantes de Santa María (Catamarca) la usan a diario. Los que vivimos en Amaicha no pertenecemos al planeta Marte. Estamos dentro de la provincia de Tucumán, que no se termina en Tafí del Valle. Esa ruta hasta el Infiernillo fue muy cara y hoy parece bombardeada. ¿Cuánto se le pagó a la empresa que la hizo? (sería motivo de investigación) ¿Creyó que estaba haciendo una ruta en La Pampa? No hizo estudios del subsuelo en zonas donde hay numerosas vertientes. Hoy el agua corre sobre la ruta y lo poco que está sano en poco tiempo estará deteriorado. ¿Por qué la “hermosa ruta” terminó abruptamente en El Infiernillo? Los que transitamos por ella decimos: “se terminó el dulce de leche”. De allí en adelante vamos como en una coctelera porque hay parches en todos lados. Las líneas blancas que marcan los costados de la ruta y la línea amarilla del centro no existen. ¿Se les acabó la pintura? Conducir de noche es un peligro. No hay muros de contención en lugares muy peligrosos, y donde ya hubo numerosos accidentes. Las piedras sobran en la zona y con ponerlas aunque sea unidas con barro como las antiguas pircas, serían útiles. Hacer propaganda turística ponderando los paisajes y el clima es insuficiente. El turista que circula por los Valles con su vehículo no vuelve, porque el cráter que no agarró de ida lo hará de regreso. Como docente que he sido califico a Vialidad con un cero bien grande. Lo mismo va para turismo.

Clara Valdez Toledo

Claudia V. de Cano

S/N Amaicha del Valle

Peña El Cardón

La Peña Cultural “El Cardón”, testimonio de una época esplendorosa con reuniones culturales de música, poesía, exposiciones, es uno de mis recuerdos más queridos por lo que al enterarme del estado ruinoso en el que se encuentra, me provoca mucha tristeza. Ella es parte de las vivencias de artistas y escritores con los que compartimos momentos inolvidables. Esta antigua casona nos abrió sus puertas generosamente y diversas actividades hallaron, entre sus muros el lugar para desarrollar y mostrarse a la comunidad aportando conocimientos en interesantes conferencias. Muchas personalidades y artistas talentosos nos visitaron en el taller Literario, en otros tiempos coordinado por el profesor Bravo Figueroa y por las profesoras Ruth Linale de Soncini y Pola Caplonch de Filipone; y ahora vivo por la buena voluntad de la poeta Vicky Chincarini. Ojalá den con el rumbo preciso para sacar adelante a esta importante casona sin privilegiar el egoísmo de nadie. Que todos apunten sólo a su conservación y mantenimiento. Si existieran mercaderes de la cultura, por favor den un paso al costado. Sería bueno volver a respirar el aire puro de antaño. Hago votos por el florecimiento de este valioso patrimonio cultural.

Nelly Elías de Benavente

nellybenavente@hotmail.com

Monumento al Bicentenario

Con respecto al monumento al Bicentenario, montado en la avenida Mate de Luna, mi primera duda es si la base soportará correctamente la altura. Estamos presenciando el resultado nefasto de muchas obras como el puente en la calle Marco Avellaneda. Los vecinos que habitan los edificios cercanos quizás adquirieron sus departamentos, entre otras condiciones, por la hermosa vista al parque. Ahora contemplarán esas puntas cruzando el cielo que hasta resultan agresivas a la vista. ¡Era tan gratificante circular desde 24 de Septiembre, y divisar las montañas! En estos últimos años sufrimos el síndrome de fobia a los espacios verdes y al asfalto sin cráteres. Fue suficiente con asfaltar parte del parque para abrir una calle que lleve directamente a un prestigioso hotel. ¿Se justificaba? Será por eso que ahora, con este monumento, cierran el paso hacia Crisóstomo Alvarez. Total, todas esa roturas y vaivenes los paga Juan Pueblo. Vienen a mi mente recuerdos de infancia cuando vivía en Mate de Luna al 1.700; mi padre recibió una chequera con la que debía pagar todos los meses por la repavimentación. Ese pago no eximía el impuesto municipal. Le costó mucho esfuerzo cumplir con ese tributo. Será por esa razón que me afecta ver cuando rompen metros y metros de asfalto con total liviandad. ¡Me puse sentimental! Olvidé que hay que dar lugar al progreso.

Rosa Elena Suárez

suarezchoco1@gmail.com

Cuidar la higiene

Los desratizadores y las autoridades sanitarias nos sugieren no tener miedo y ser más higiénicos. Ello para evitar problemas graves que ocasionan ratas y ratones. Creo que los primeros que debieran higienizar los lugares de nuestra ciudad son las autoridades (municipales y o/provinciales). Esto es así si se tiene en cuenta la invasión de roedores que hay en la zona de El Bajo, quizás por los puestos de vendedores que allí se asentaron. Para ser más precisa, en San Lorenzo primera cuadra, las ratas nos visitan todas las noches, aunque se extremen las medidas de higiene. Otro lugar que los roedores han tomado como dueños y señores, es el sector de la peatonal Muñecas. Quien haya transitado esta arteria entre las 7 y 7.30 habrá podido ver a estos ratones pasearse tranquilamente de un lugar a otro. Espero que las autoridades tomen cartas en el asunto y los inspectores municipales visiten negocios y depósitos, en especial el de los supermercados, casas de comida, etcétera, como así también en la zona de la ex Terminal de Ómnibus y sobre avenida Sáenz Peña, donde existen sobre las veredas muchos lugares en donde pueden hacer sus nidos estos animales.

Juana M. Farías

fariasjuani@yahoo.com.ar

Turnos en Anses

Comparto la carta de la lectora Natalia Quiroz acerca de los turnos en Anses. Hace tres meses que peregrino vía internet para sacar un turno para un trámite de Haberes Devengados por fallecimiento de mi madre. Intenté en diferentes horarios y días y siempre lo mismo: “intente nuevamente en 24 horas “. Concurrí hasta las oficinas de Anses Centro y no pude hacerlo, pues las terminales no me permitían realizar el trámite. Espero se solucione a la brevedad y mejoren la atención.

Silvia Romero

silvuchi-mar@hotmail.com