Paraguay apuesta por los veteranos

CHILE.- Tan maduro como desgastado, a la espera de un recambio generacional que se da a cuentagotas, Paraguay llega a esta Copa América sumido en una nube de dificultades, interrogantes y descreimiento.

Un descreimiento, se entiende, que no toca al técnico Ramón Díaz, seducido por la idea de que entre los chispazos otoñales de los históricos y los chispazos bautismales de los recién llegados o a punto de llegar (Fabián Balbuena, Bruno Valdez, Oscar Romero, Derlis González) alcanzará un rendimiento que si no fecunda a vuelta de esquina por lo menos impulsará un salto de calidad en las eliminatorias del Mundial de Rusia.

Entretanto, es más dable imaginar un equipo guaraní superior al que el domingo dejó una pobre imagen en un amistoso con Honduras (2-2 en Asunción), pero lejos de la identidad necesaria para jugar de igual con los mejores, especialmente con Argentina y Uruguay. A uno de ellos deberá desplazar para llegar a cuartos de final o como mínimo quitarles puntos a fin de ocupar un tercer puesto promisorio.

Paraguay es un histórico de la Copa América, una de las cuatro selecciones que más veces la ha jugado, un total de 34, incluso una más que Brasil, amén de habérsela llevado en la remota edición de 1953 en Perú y la también lejana de 1979, en este caso sin sede fija.

También, por cierto, es histórica la base de futbolistas que ha dispuesto el “Pelado” Díaz, con nueve de 30 años o más y algunos de ellos en pleno otoño o distantes de sus mejores jornadas: el arquero Justo Villar (37 años), el defensor Paulo Silva (35) y los delanteros Nelson Haedo Valdez (31), Oscar Cardozo (32) y Roque Santa Cruz (33), aunque en Santa Cruz se fincan las más robustas esperanzas de recuperar una potencia ofensiva escasa en el equipo que pasó sin pena ni gloria por la fase clasificatoria del Mundial de Brasil. De los 23 futbolistas seleccionados por el “Pelado” Díaz hay cinco que juegan en la liga de Paraguay, siete en México, tres en la Argentina, uno en Brasil, uno en Chile, uno en Colombia, uno en Alemania, uno en Italia, uno en Suiza y dos en Alemania.

Como la necesidad tiene cara de hereje es probable que Ramón busque refundar los atributos que mejores resultados han dado a Paraguay: una defensa rocosa y fuerte en el juego aéreo, un mediocampo con mucha cultura del sudor y una delantera apta para atacar los espacios. Mientras tanto, el sábado se las verá con Argentina.