Un colaborador del papa Francisco pide no buscar conflictos entre la Iglesia y Cristina Fernández de Kirchner

Un colaborador del papa Francisco pide no buscar conflictos entre la Iglesia y Cristina Fernández de Kirchner

Monseñor Karcher se refirió al documento de la Conferencia Episcopal Argentina que incomodó a la Presidenta.

MONSEÑOR GUILLERMO KARCHER / FOTO TOMADA DE LANACION.COM.AR
MONSEÑOR GUILLERMO KARCHER / FOTO TOMADA DE LANACION.COM.AR
19 Mayo 2014
BUENOS AIRES.- Uno de los más estrechos colaboradores argentinos del papa Francisco, el ceremoniero pontificio, monseñor Guillermo Karcher, dijo hoy que "no hay porqué buscar motivo de conflicto" en relación al documento de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) que habló de diferentes tipos de violencia que se viven hoy en Argentina.

"Lo charlamos inmediatamente (con el Papa) y analizamos el documento de la Conferencia Episcopal. Hay que entender el lenguaje en un contexto. Me parece que no hay porqué buscar motivo de conflicto", afirmó Karcher en declaraciones a radio La Red.

El colaborador de Francisco aseveró asimismo que el documento de la CEA "es una invitación a la reconciliación nacional como tantos otros documentos que vienen haciéndose en Argentina desde hace años. Acá se lo ha leído como algo serio, como un llamado que hace siempre la Iglesia a saber convivir de un modo mejor", añadió monseñor Karcher, indicó la agencia Télam.

El pasado 10 de mayo, durante el acto por los 40 años del crimen del cura villero Carlos Mugica, la Presidenta había criticado el documento de los obispos, al sostener: "Quienes dicen que hoy la Argentina es violenta, quieren reeditar viejos enfrentamientos".

El contenido de la CEA -que llevó el título "Felices los que trabajan por la paz"- fue analizado la semana pasada en una reunión que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner mantuvo en la residencia de Olivos con el presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo. También participaron de ese encuentro con la mandataria el secretario general del Episcopado, monseñor Enrique Eguía Seguí; y el obispo auxiliar de Buenos Aires, Joaquín Sucunza.

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