Se cumple un siglo del nacimiento de don Anselmo Ruiz, tucumano que dejó, en su provincia y en la región, un imborrable recuerdo de empresario lleno de visión y de espíritu creador. Hijo de inmigrantes españoles, perdió a su padre en la adolescencia. Por eso, mientras cursaba el Colegio Nacional, acometió diversas tareas para ayudar a su familia. Se preocuparía luego de formarse en idiomas, además de asistir a cursos nocturnos de administración de empresas.
Apoyado sólo en sus propias fuerzas, se inició como socio y administrador en una pequeña firma constructora. Más tarde, creó firmas de calzados –Mayo, Ransel, Mac Center- y luego otras de lanas, artículos de bebes y plásticos. Llegó a tener habilitadas 39 sucursales a lo largo del Noroeste, a la vez que diversificaba sus tareas en la agricultura y en el tambo.
En 1965, con otros empresarios, integró la Embotelladora Noroeste, cuyo directorio presidió. A lo largo de los años, sumó nuevas plantas, como Frontera, Paraná Refrescos y Embotelladora Santa Fe, distribuidas en 9 provincias, que posteriormente se consolidaron en la prestigiosa sociedad anónima Embotelladoras del Interior.
En cuanto a su actividad en organismos financieros, fue en 1967 el primer presidente del Banco Empresario de Tucumán, que lo reeligió varias veces en esa función. Durante diez años se desempeñó, además, como director titular del Banco Federal Argentino, entre otras instituciones de esos ámbitos.
Expresó su espíritu generoso con la donación de sus honorarios de director, a instituciones como el Cottolengo, los Hogares San José y San Roque, la Sala Cuna, el Hogar del Ciego, Caritas, la Fundación del Banco Empresario, para citar las principales beneficiarias. Había formado un hogar ejemplar en 1941, con doña Lucía Giorgi, y educó con esmero a sus dos hijos, que serían luego sus estrechos colaboradores.
Falleció en su ciudad natal, el 25 de julio de 1989. El centenario del natalicio es ocasión para recordar a ese gran empresario, de trato afectuoso, grata conversación, profundo sentido ético y visión solidaria de la vida, que fue cabalmente don Anselmo Ruiz.