Cartas de lectores
13 Septiembre 2013

AGUA (I)

La provincia y sus habitantes soportan las conductas de quienes por ahorrar costos queman cañaverales y campos durante todo el invierno sin ninguna consideración por los daños ambientales que causan y sin penas ni castigo por parte del Estado. Ahora, la sequía que nos afecta en la provisión de agua, nos confronta con incendios forestales en los cerros y provocados en campos y los bomberos deben luchar con pocos recursos contra estos peligros. El Aeroclub se ha convertido en base de operaciones para el abastecimiento de agua con su propia bomba y cisterna a los aviones hidrantes. De alguna forma el Estado debiera prever estas potenciales catástrofes ambientales y organizar para el futuro planes de manejo de fuego con mayores recursos humanos y equipamiento además de hacer prevención activa. Los bomberos voluntarios debieran ser una fuerza pagada y profesionalizada por los riesgos que asumen en esta tarea. Entre otras medidas, también se deberían prohibir los fuegos de artificio que todos los fines de semana se detonan indiscriminadamente en los salones de fiestas y confiterías del pie del cerro, en San Javier y lugares con riesgo de incendios. Debo agregar que esta semana tras un corto respiro, nuevamente no tenemos una gota de agua en nuestras casas. El intendente nos informó que gestionó un convenio con el Aeroclub para suplementar la provisión pero el recurso hídrico no alcanza para dar agua a la población y luchar contra el fuego al mismo tiempo. Ojalá se pueda controlar pronto esta preocupante situación.

Mónica Herbst
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AGUA (II)

San Miguel de Tucumán carece de agua porque las autoridades así lo quieren. La construcción de túneles es una fantasía y un gasto innecesario, pues en épocas de lluvia estarán inundados permanentemente (ejemplo, 24 de Septiembre al 1.200). Existen otras alternativas más viables, y no representan mayores erogaciones. 1) Doble mano Marco Avellaneda-San Juan-Suipacha. 2) Tercer riel con la línea Mitre desde km 800 a Cevil Pozo o Cruz del Norte empalme "línea C" a Pacará, tiene playa amplia y libera Central Córdoba, permitiendo el levantamiento de rieles y el cruce a nivel. Continuando por Gobernador Nougués-San Felipe "Línea CC". Los ahorros se deben destinar a la perforación profunda de pozos, ya que es conocido que nuestro territorio está asentado en una enorme cisterna natural. Espero ser apoyado para que ningún habitante sufra la carencia de agua.

Próspero Figueroa
Lavalle 1.511 
San Miguel de Tucumán

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AGUA (III)

Hace décadas, Miguel Lillo predijo que si Tucumán no protegía sus ecosistemas para el año 2000 comenzaría a tener problemas de agua. Hemos entrado a un peligroso ciclo de aridez, que ocasionará pérdidas económicas incalculables. Cuando uno recorre regiones semiáridas y áridas de la patria puede ver los tremendos esfuerzos que hacen sus pobladores y lo sacrificado que les resulta producir en un ambiente seco. Se cooperativizan para acceder a créditos usurarios del Banco Mundial y otras entidades para poder perforar pozos profundos y obtener el agua suficiente para la producción y el consumo. Las zonas áridas y semiáridas cubren el 75% del territorio. El tucumano que conoce Mendoza siente vergüenza; ellos en la aridez parecen vivir en un bosque y nosotros desde una selva parecemos vivir en un desierto. Destruimos la naturaleza, estamos en la mugre, y sin respetar ninguna norma (no es sólo culpa de los gobernantes, porque la basura la tiramos nosotros). La indignación de los vecinos crece cuando empresas como la SAT, con miles de usuarios en el interior, no hacen la inversión para garantizar la calidad del servicio, cuando el cobro de sus boletas es arbitrario y tiene un costo mayor que el gas y la electricidad, tampoco controla ni sanciona a quienes derrochan desaprensivamente y no evalúa quiénes gastan más y menos. Si a los campesinos pobres de las zonas desérticas les mostráramos las imágenes -de casi un centenar de lavaderos clandestinos en la avenida Wenceslao Posse, y en muchos otros puntos de la capital y el interior-, donde se derrochan millones de litros de agua potable para lavar vehículos, se tiran aceites contaminantes al suelo, colgados del servicio eléctrico, destruyendo los árboles que ninguno plantó, y seguramente beneficiarios de planes sociales, ellos nos preguntarían: ¿Cuánta será la coima que pagan para hacer semejantes desastres? Señores gobernantes, demuestren que no tienen nada que ver.

Ricardo Esteban Cano
Güemes 230 
Lastenia-Tucumán


LOS UNOS Y LOS OTROS

Para los directivos de la SAT H2O quiere decir: Hoy 2 de Octubre. Para los vecinos del Barrio Horco Molle quiere decir: agua. Los directivos seban mate con agua. Los vecinos seban mate con yerba. Los directivos lavan la ropa cuando quieren. Los vecinos, cuando la SAT les da agua (entre la 1 y las 6). Los directivos riegan sus jardines todos los días. Los vecinos, cuando llueve. Los directivos tienen agua en la heladera. Los vecinos la tienen sin agua. Los directivos hierven los fideos en agua. Los vecinos comen fideos secos. Los directivos se bañan cuando quieren. Los vecinos nos quedamos enjabonados. Los directivos llenan sus piletas con agua. Los vecinos, con aire. Los directivos toman agua del caño. Los vecinos del Horco Molle compramos agua para tomar.

Gustavo Luis Sobral
[email protected]


CANAL SIN ENTUBAR

Había una vez al sur de la ciudad un humilde barrio habitado por gente laboriosa que vivía alrededor de una planta azucarera llamada ingenio Amalia. Muchos trabajaron en ella, que tenía las casitas de empleados, otras para los obreros y el "conventillo" para los zafreros "golondrina", rodeada de fincas de cañas, con su escuela primaria, una vía de FFCC que transportaba la materia prima, sus callecitas de tierra o enripiadas por donde circulaban los carros desde los cargaderos al canchón. Pasó el tiempo, cerró la fábrica, fue desmantelada toda su edificación y demolidas sus paredes, quedando como mudo testigo la vieja chimenea. En el predio se instalaron numerosas familias que levantaron sus casas con los mismos ladrillos que recuperaron. Hoy, el llamado progreso viene lento a esta zona: hay buena iluminación; algunas calles se pavimentaron y aquel ambicioso plan de entubar el canal paralelo a las vías para transformar la calle Bernabé Aráoz en doble mano con un guardarraíl divisorio entre calle y vía, quedó trunco hace un año y se convirtió en un "magnífico" basural -esto por culpa de la gente y los de la cooperativa "Argentina trabaja" que arrojan de todo-. El terraplén, con sus durmientes al aire, está descalzado y podría ocasionar la caída de algún tren; en su margen se instalaron familias con viviendas precarias que cuando lleguen las lluvias, con la corriente de agua que llegue desde el centro, corren peligro. El puente peatonal de calle Olleros se cae a pedazos y colorín colorado, la fábula ha terminado. Pregunto: ¿se pavimentará Bernabé Aráoz? ¿Se arreglará el puentecito? ¿Se evitará la caída de algún tren? Nosotros, los viejos de Amalia, ¿veremos un final feliz? ¡Sólo Dios y nuestras autoridades municipales y ferroviarias tienen la palabra!

Mario J. Ossan
Magallanes 1.206 
San Miguel de Tucumán


ESTATUAS DE PRÓCERES

En la avenida de Los Próceres, en el parque 9 de Julio, se están realizando una serie de obras importantes destinadas, supongo, a su mejora. Pero no se registra ningún movimiento en relación con los monumentos allí enclavados. Monumentos públicos, según la mentalidad del siglo XIX, de claro corte nacionalista que, en este caso, es el recuerdo de hombres cuyas vidas y acciones fueron significativas para la historia de Tucumán. Sin embargo, estas "estatuas" sobre pedestales son recuerdo de otra historia: de la dictadura militar del 76, porque fue en ese marco que el entonces general Bussi obligó, con apremios y amenazas, a un grupo de escultores de nuestra ciudad a que las hicieran en tiempo récord, faltándoles el respeto a los artistas. Estos le advirtieron de la imposibilidad o mala factura que resultaría de tamaña empresa, pero más pudieron la desmesura y el miedo. Y ahí están: son desproporcionadas, feas, mal terminadas y lejos están de honrar a aquellos hombres. Este sería el momento de hacer algo con estos "monumentos" por el bien de nuestra ciudad y honrando la memoria. Se me ocurren dos alternativas, seguro que a especialistas y lectores en general se les ocurrirán otras mejores: sacarlas o intervenirlas, convocando en concurso público a los artistas tucumanos para que hagan propuestas en uno u otro sentido. De manera que el espacio que dejen, si las sacan, sea valorizado o, si ahí se quedan, tengan sentido, cuenten lo ocurrido, sean testigos de distintos momentos de nuestra historia.

Griselda Barale
[email protected]


EL EPAM

No hace falta decir mucho más. El lector Miguel Castro lo dijo en su carta (7/9): 250 personas festejaron el cumpleaños del EPAM. Eran 1.200 los alumnos en calle Rivadavia. No importa el número de vehículos estacionados, la realidad es que está muy lejos de ser un beneficio que alcance a la mayoría. No es capricho, no es RC (resistencia al cambio) ni PS (poco seso); es imposibilidad concreta, real y triste de continuar los talleres. De vuelta en muchos caminos, a un gran porcentaje del alumnado no les interesa los entretelones del porqué del cambio o cómo o con cuánto se maneja la institución. Eso no los hace menos inteligentes, menos formados o meros molinos de vientos. Tienen derecho a querer disfrutar de este tramo de la vida sin otras preocupaciones. Para ello necesitan un lugar que los contenga, que sea digno, accesible, con las condiciones necesarias, como un jardín maternal en el caso de los niños que debe seguir pautas de sentido común para el cuidado, esparcimiento e higiene de los menores, exactamente igual para los adultos mayores. Lo felicito si usted puede continuar concurriendo y disfruta de los beneficios que le otorga el lugar, en lo particular. Yo me entristezco por esa mayoría que no puede. Y habiéndonos contactado con un grupo que lucha por el cambio de lugar, me ofrezco públicamente a apoyarlos y ayudarlos en todo lo que pueda. Porque si Dios quiere, a viejitos llegamos todos. Hasta el gobierno divide hoy de manera violenta, no se contagie. Con respeto crecemos en las ideas, crecemos como personas y también como país. Y le digo esto con todas mis neuronas, aunque tenga algunas "nuevecitas" como diría el genial Chavo.

Patricia Molina
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