"Se ve tristeza en las calles y personas que buscan ayuda"

"Se ve tristeza en las calles y personas que buscan ayuda"

El nivel del agua decrece. Pero el clima que se vive en la capital bonaerense es de temor.

CAOS. EL vehículo muestra la fuerza del temporal que sacudió La Plata. DYN CAOS. EL vehículo muestra la fuerza del temporal que sacudió La Plata. DYN
05 Abril 2013
"Todavía se están rescatando personas y recuperando cuerpos. Los hospitales están abarrotados. Sólo se ve tristeza".

Transcurridas 24 horas de uno de los mayores desastres climáticos sufridos en la ciudad de La Plata, la situación comienza a normalizarse poco a poco. El nivel del agua decrece. Pero el clima que se vive en la capital bonaerense es de temor, ante tamaña muestra de la naturaleza.

Según la tucumana Mónica Rodríguez, el panorama se mantiene sombrío. "Ahora lo que más notamos, aparte de la tristeza que tiene la gente que ha perdido todo, es el miedo", sostuvo.

Ella indicó que el problema se mantiene a causa de que el agua va descendiendo lentamente, por la poca inclinación que tiene el terreno donde se emplaza la ciudad.

"Mis hijos fueron a colaborar en la limpieza de la escuela y luego fueron a ayudar en los centros donde se reciben donaciones", indicó Rodríguez.

Veredas negras
"Como drena lentamente se ven como ciénagas. Mientras, en donde el agua bajó queda todo negro, entre el barro y la basura descompuesta", relató Rodríguez.

Su hija, María Victoria Medina, contó que en la zona céntrica -en donde viven- el agua ya bajó y los servicios fueron normalizándose, pero que pocas zonas corrieron esta suerte. "Esto agarró a todo el mundo sin distinciones, sean ricos o pobres", agregó.

A pesar de este panorama, la joven destacó la solidaridad de las personas, aunque el esfuerzo no logra dar abasto ante la cantidad de ayuda requerida.

Desabastecimiento
En cuanto a los negocios, a causa de que muchas calles siguen anegadas -al igual que los ingresos a la ciudad- el circuito de abastecimiento de los locales se ha visto interrumpido.

"Yo veo gente asustada. Casi todos los negocios cierran temprano en la tarde, antes de que anochezca. Se consigue poca lavandina y poca agua mineral. Lo peor que puede pasar es que se generalice el nerviosismo", consignó.

Ante esta situación, y las diversas denuncias realizadas, el Gobierno habilitó una línea de reclamos de Defensa al Consumidor, para denunciar los negocios que incrementaron los precios de los productos requeridos luego de la inundación.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios