El calor abrasador y la elevada humedad le dieron forma a una tarde insoportable en Tucumán, donde caminar una cuadra sin sudar es una misión imposible. La sensación térmica alcanzó los 43,3°, según reportó a las 16 del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). A esa hora, el mercurio llegó a los 36°, marca que estaba prevista como máxima.
Para la tarde-noche, en tanto, podría haber algún alivio, con probables chaparrones. Osvaldo Molina, de la estación local del SMN señaló que se aguarda una semana con marcas agobiantes. Mañana, la máxima trepará a 38°, aunque aumentará la inestabilidad. "Esto traería tormentas por la tarde. Pero la temperaturas no bajará muchos grados", explicó.
Para el miércoles, el escenario no cambiará demasiado. El cielo se despejará de nuevo y el termómetro volverá a subir: la máxima prevista rondará los 38°. LA GACETA ©