27 Noviembre 2012
El feriado amaneció teñido de sangre en Tucumán. Poco antes de las 8, en la comisaría de Lastenia recibieron el llamado telefónico del cabo Sergio Moya, que presta servicio en la dirección de Delitos Rurales y Ecológicos de la Policía. Según comunicó el uniformado, circulaba en moto por la ruta 9 rumbo al puesto de San Cayetano cuando advirtió la presencia de un cadáver al costado del camino.
El lugar exacto del hallazgo fue el kilómetro 1.286, frente a una estación de servicios. "Estaba tendido en la tierra, tenía un fuerte golpe en el rostro y manchas de sangre", señaló la Policía.
Un gato hidráulico
Al costado del cuerpo había sangre por todas partes. Quienes estuvieron en el lugar también habían dejado una botella de cerveza, otra de vino y un gato hidráulico. Esa herramienta sería el elemento con el que le provocaron la muerte. Además, según agregó la Policía, en la tierra podían verse huellas de frenadas de un automóvil que salió hacia la ruta.
Hasta las 17 de ayer, se desconocía la identidad del individuo, ya que no llevaba ningún tipo de documentación. Sin embargo, poco después fue reconocido por su padre en la morgue judicial.
Desde la fuerza precisaron que la víctima fue identificada como Hugo Miguel Jerez, que tenía 26 años, y que vivía en la localidad de Mixta, en el departamento de Leales.
Según declaró su padre, Miguel Ángel Jerez, el joven trabajaba en un criadero de gallinas situado en la localidad de Monte Bello. También afirmó que su hijo salió de la casa el domingo a las 15 y que no volvieron a verlo.
Dos detenidos
Fuentes relacionadas con la investigación revelaron a LA GACETA que ayer había dos personas detenidas por el crimen: se trataría de un empleado de la Policía -que no es el mencionado Sergio Moya- y de un primo del uniformado. Además, hasta el cierre de esta edición, no descartaban que el crimen de Hugo Miguel Jerez pudiera tener algún tipo de vinculación con el cuerpo calcinado que encontraron dentro de un Renault 9 en la Cañada de Viclos, también en Leales.
Trabajaron en el lugar personal de la división Homicidios y Delitos Complejos y de la Unidad Regional Este.
El lugar exacto del hallazgo fue el kilómetro 1.286, frente a una estación de servicios. "Estaba tendido en la tierra, tenía un fuerte golpe en el rostro y manchas de sangre", señaló la Policía.
Un gato hidráulico
Al costado del cuerpo había sangre por todas partes. Quienes estuvieron en el lugar también habían dejado una botella de cerveza, otra de vino y un gato hidráulico. Esa herramienta sería el elemento con el que le provocaron la muerte. Además, según agregó la Policía, en la tierra podían verse huellas de frenadas de un automóvil que salió hacia la ruta.
Hasta las 17 de ayer, se desconocía la identidad del individuo, ya que no llevaba ningún tipo de documentación. Sin embargo, poco después fue reconocido por su padre en la morgue judicial.
Desde la fuerza precisaron que la víctima fue identificada como Hugo Miguel Jerez, que tenía 26 años, y que vivía en la localidad de Mixta, en el departamento de Leales.
Según declaró su padre, Miguel Ángel Jerez, el joven trabajaba en un criadero de gallinas situado en la localidad de Monte Bello. También afirmó que su hijo salió de la casa el domingo a las 15 y que no volvieron a verlo.
Dos detenidos
Fuentes relacionadas con la investigación revelaron a LA GACETA que ayer había dos personas detenidas por el crimen: se trataría de un empleado de la Policía -que no es el mencionado Sergio Moya- y de un primo del uniformado. Además, hasta el cierre de esta edición, no descartaban que el crimen de Hugo Miguel Jerez pudiera tener algún tipo de vinculación con el cuerpo calcinado que encontraron dentro de un Renault 9 en la Cañada de Viclos, también en Leales.
Trabajaron en el lugar personal de la división Homicidios y Delitos Complejos y de la Unidad Regional Este.
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