LA GACETA / FOTO DE ANTONIO FERRONI
Hace meses que el agua desgastó el pavimento en ese sector de la calle Rivadavia al 300. La rotura del caño subterráneo, dicen los vecinos, fue tapada con pavimento. Por eso, el líquido resurge por entre la grava y corre por el asfalto. Por la misma cuadra -y por las siguientes- corre también la indignación de los habitantes y comerciantes. "En vez de cambiarle el nombre, ¿por qué no la arreglan? Sería mejor homenaje ¿no?", propone ofuscado José Carlos De Rosa (58). El hombre y su esposa Teresa Rocha (59) son dueños de una tradicional librería sobre una de las nueve calles que pasarán a llamarse próximamente "Virgen de la Merced" (entre 24 de Septiembre y avenida Sarmiento).
El cambio aprobado por el Concejo Deliberante el jueves (por el centenario de la coronación de la Virgen y por el Bicentenario de la Batalla de Tucumán) no fue recibido con alfombra roja por quienes viven o trabajan allí. A lo largo del tramo afectado están instalados un promedio de 10 comercios por cuadra. Inclusive, un sanatorio, un centro odontológico y dos bares llevan el apellido del ex presidente argentino. La mayoría de quienes tienen emprendimientos coinciden con José y Teresa y consideran que el cambio no era necesario, dado que hay otras prioridades que deberían ser tratadas por los concejales.
"Soy muy religioso, pero es un despelote. No tiene sentido, a la Virgen se la puede honrar de otra manera", argumenta José y sale hasta la vereda para mostrar el bache frente a su negocio. "Será un trastorno. Tendremos que avisar a todos los preveedores y cambiar las boletas", añade Teresa.
"Vinieron de parte de varios concejales a hacer encuestas. Contestamos que no estábamos de acuerdo e igual votaron a favor. Ahora, si nos dicen que ellos harán los trámites, cambia todo", reniega Valeria Lena (39), dueña de una casa de indumentaria en la primera cuadra.
Analía (62) -prefiere no dar su apellido- trabaja en una agencia de Quiniela y ya se lamenta por los trámites que deberá hacer en la Caja Popular o la AFIP. "No estoy en desacuerdo que se llame como la Virgen, pero debería haber sido sólo esta primera cuadra" opina respecto al lugar donde está la parroquia de la Victoria y la basílica en la que se encuentra la imagen.
En una cerrajería, se larga el debate cuando llega LA GACETA. "Es una complicación impositiva para los que tenemos comercios", protesta Ricardo (59) tras el mostrador. Repasa los trámites que cree que podrían tener que realizar, como el reajuste de la caja registradora. "¿Ya rige? ¡Qué haremos con las tarjetas nuevas del negocio!", añade Marcela (45), quien agrega que para el rubro ese tipo de publicidad es clave. Alejandro (40) aclara que no es que la Virgen no merezca llevar el nombre de una arteria: "tradicionalmente, esta es Rivadavia. Deberían haber buscado una nueva. Además, el ex presidente es una figura de la historia". Su opción se lleva la aprobación de todos en el local. Nicolás (53) concluye alertando que las quejas de los clientes de la zona son generalizadas.
"¡Pobres los vecinos que acaban de recibir sus nuevos DNI!", advierte Marcos (37) tomándose la cabeza. Es encargado de un edificio nuevo. Cuenta que sólo durante la última semana, llegaron tres documentos con el flamante domicilio, que pronto será viejo.
"Si bien la religión pesa en este país, últimamente se cambian los nombres de todo. No estoy de acuerdo", refunfuña Luis Ugo (67).
Los habitantes tienen la esperanza de que el intendente capitalino, Domingo Amaya, vete la ordenanza. Es un hecho, sin embargo, su promulgación y entrada en vigencia durante esta semana, de acuerdo con fuentes municipales. Según se supo, el municipio ya envió notificaciones a organismos oficiales como Rentas o la AFIP. Otro signo de ello es que, al menos entre 24 de Septiembre y Marcos Paz, ya desaparecieron los nomencladores de calle Rivadavia. Ocurre que ya se encargaron los nuevos carteles.
Mientras, continúa la iniciativa para juntar firmas contra el cambio. Si bien ayer se había consignado que era impulsada por Andhes, su directora, Josefina Doz Costa, aclaró que inició la campaña en calidad de vecina de la capital.
Las instancias del cambio
Los ediles Germán Alfaro y Christian Rodríguez propusieron que Rivadavia se llame "Nuestra Señora de las Mercedes".
El proyecto fue modificado para acortar el nombre a "Virgen de la Merced". Fue aprobado el jueves con el voto del oficialismo.
El intendente, Domingo Amaya, promulgaría la ordenanza durante esta semana. Los carteles nomencladores ya fueron encargados.
