BUENOS AIRES.- El escándalo que involucra a Moria Casán, parece estar lejos de apagarse. La diva regresó hoy al país tras estar detenida por un supuesto robo de joyas en Paraguay, hecho que consideró "un disparate". "Están diciendo cualquier huevada. Lo del robo es tan disparatado que no tengo que aclarar nada porque oscurece. Si tuviera algo que ver estaría en cana", señaló esta tarde.
"Me las puse por pedido de ellos. Yo no uso joyas porque interactúo con el público y te la pueden sacar. Cuando llegué al camarín lo primero que hice fue sacarme las joyas y vienen y me dicen 'desaparecieron las joyas'", precisó. Casán puso un duda la autenticidad de las joyas valuadas en 80.000 dólares por Armando Benítez (el dueño de la joyería), al asegurar que "para mí eran una réplica".
En tanto, la fiscal paraguaya Celeste Campos Ross dijo hoy que Casán responsabilizó a su socio Luciano Garbellano y a su asistente Alexis Soto, conocido como "Galo", por el destino de las joyas que recibió prestadas para un show. "Soto fue el encargado de sacar el collar (a Casán) y guardarlo en la caja respectiva, y Garbellano era el encargado que tenía que devolver las joyas. Son palabras de la señora Moria en su declaración", manifestó en declaraciones al canal TN.
La representante del Ministerio Público explicó que "por eso" ordenó "las detenciones de estos señores ayer a la tarde", que hoy se presentaron ante la fiscalía para prestar declaración.
Por su parte, Garbellano minimizó el episodio y acusó al dueño de la joyería de llevarse las alhajas después de que terminó el show. "Nunca pasó nada en camarines. Benítez quiso promocionar su joyería. Investigando, a través de nuestros abogados, nos dimos cuenta de que él tiene causas por tráfico de oro", dijo desde Asunción. (DyN)