WASHINGTON, Estados Unidos.- Chita, el fiel chimpancé que acompañó a Tarzán en la pantalla grande de los años 30 y 40, murió a los 80 años de edad.
El chimpancé, además de ser particularmente longevo, fue una de las estrellas de Hollywood en la década de los 30, participando en las películas "Tarzán the Ape Man" (Tarzán de los Monos) en 1932 y "Tarzán and his Mate" (Tarzán y su compañera) en 1934. Después de acompañar a Johnny Weissmuller como el hombre de la selva, Chita se retiró a un santuario de Florida donde vivió por más de 50 años.
En la cálida Florida, el chimpancé se dedicó a la pintura, al football americano y a la música. Según contó Debbie Cobb, director del Santuary Suncoast Primate, al diario Tampa Tribune, Chita pintaba con sus dedos, miraba football y le relajaba la música cristiana. "El podía saber cuando yo tenía un día bueno o un día malo. Siempre trataba de hacerme reír si yo estaba teniendo un día malo. Estaba muy a tono con los sentimientos humanos", explicó Cobb.
Aún así, vale aclarar que Chita no se destacaba por tener un espíritu muy cristiano. "Cuando a él no le gustaba alguien o algo que pasaba, tomaba algo de sus excrementos y se los arrojaba. Podía lanzarlo hasta a unos 30 pies (9 metros aproximadamente) a través de las barras" de su jaula, contó Ron Priest, un voluntario que trabaja en el santuario. (AFP-NA)