Es un escándalo institucional sin precedentes, afirmó Rossi

"Considero que los hechos presentados en esta denuncia generan un halo de sospecha sobre su accionar y el de sus colaboradores de confianza y lo que es más triste aún, sobre la propia universidad que se ve envuelta en un escándalo institucional sin precedentes". Con estos términos, y por carta, María Luisa Rossi de Hernández, le hizo saber al rector de la UNT, Juan Cerisola, que renunciaba al cargo de vicerrectora de la casa de altos estudios. Fue después de la difusión del polémico video con el que se intenta comprobar la compra de votos por parte del oficialismo con vistas a la asamblea del 18.

La candidata que aspira a conducir la casa de altos estudios ahondó sus diferencias con su ex compañero de fórmula. Y, en la misiva, le recordó "su deber de rendir cuentas ante la comunidad universitaria, responsabilidad insoslayable que cabe a todo funcionario público". La renuncia de Rossi llega casi una semana antes de que se reúna la asamblea y designe a las nuevas autoridades de la UNT. "A lo largo de mi vida pública he velado por el resguardo de las instituciones y de los valores humanos", afirmó la renunciante. "Las conductas que sostengo y solicito, a usted y a sus funcionarios, son las que debieran llevar a los universitarios de bien a seguir creyendo en la institución, a sentirse orgullosos de ella, a defenderla y prestigiarla. Espero que usted pueda tomar las medidas necesarias en salvaguarda de la universidad pública", se expresa en la carta girada al actual rector de la Universidad.

En ese mismo escrito, Rossi de Hernández puntualiza: "estos son los motivos de una decisión que, aunque con dolor, está asistida por la buena fe y la honestidad que me acompañan desde mis inicios en el ámbito universitario".