En consonancia con lo ocurrido la semana pasada con algunos gremios estatales, el Gobierno provincial cerró hoy el frente de conflicto que mantenía con la Asociación de Trabajadores de la Sanidad (ATSA). Las partes suscribieron al mediodía un acuerdo en la sede gremial, informó a LA GACETA el secretario general del sector, René Ramírez.
Según el dirigente, la recomposición salarial consistió en un incremento de 50 puntos a la base de cálculo. Esto permitirá que el básico de la categoría más baja sea de $ 785 y el de la más alta se eleve a $ 1.435. La suba, agregó, más el blanqueo de dos sumas fijas, llevará a que un trabajador del sector perciba un mínimo de bolsillo de $ 1.800.
"Con lo conseguido también se beneficiarán los jubilados e impactará en varios ítems de los activos, como el presentismo, escalafón y pago por título", dijo Ramírez. En el acto de firma del convenio, que se realizó en la sede gremial de Suipacha al 500, estuvieron presentes los ministros de Gobierno y Salud, Edmundo Jiménez y Pablo Yedlin, respectivamente. LA GACETA ©