
PREMIADA. La actriz ganó dos Oscar y cuatro Globos de Oro. REUTERS

NUEVA YORK.- El papel de Jessica Lange como la joven muchacha rubia que caía en las garras de “King Kong” fue el comienzo de su carrera, y casi también su final. El filme del productor italiano Dino De Laurentiis, una reedición del clásico del monstruo de 1933, recibió en 1976 críticas tan demoledoras que la actriz norteamericana pasó tres años sin recibir ofertas cinematográficas.
Sin embargo, su interpretación de la apasionada amante de Jack Nicholson en el drama "El cartero llama dos veces" en 1981, fue un giro en su carrera. Con sus convicentes papeles de mujeres fuertes, aunque a la vez vulnerables, pasó a formar parte del primer equipo de las actrices de Hollywood, ganadora de dos premios Oscar y cuatro Globos de Oro. Aunque hoy Jessica Lange cumple 60 años, no ha perdido ese "algo".
El gran éxito le llegó muy poco después de la legendaria escena con Jack Nicholson en la mesa de cocina. En 1983 obtuvo dos nominaciones al Oscar: una por "Frances", la biografía de la actriz Frances Farmer, destruida por la fama, y otra por su papel de amiga de Dustin Hoffman en la comedia "Tootsie", de Sidney Pollack. Por esta película pudo llevarse a casa el premio a la mejor actriz secundaria. Hasta los años 90, Lange fue eterna candidata en las listas de los nominados al Oscar. Sus interpretaciones en "Country", "Music Box" y "Cape Fear" fueron especialmente elogiadas. En la competencia por el rol protagónico en la cinta musical "Sweet Dreams" sobre la cantante country Patsy Cline incluso logró vencer a la superestrella Meryl Streep, que luego admitió sin envidia que la historia era impensable sin Lange. Finalmente, recibió en 1995 su segundo Oscar, esta vez como actriz protagónica, por el drama "Operation Blue Sky", donde interpretó a la esposa de un oficial (Tommy Lee Jones).
La actriz se respalda en su familia para trabajar. Desde 1982 vive con el escritor, director y actor Sam Shepard, una relación inusualmente estable para parámetros de Hollywood. Sin embargo, la relación no comenzó sin sobresaltos. Cuando la pareja se conoció, Lange formalmente aún estaba casada con el fotógrafo español Paco Grande y esperaba un hijo de su compañero sentimental de entonces, el afamado bailarín ruso residente en Nueva York Mijail Barishnikov. Con Shepard llegaron otros dos niños y Lange decidió concientemente hacer una pausa. “Para mí nunca hubo algo más importante que ser madre, tener una familia y un hogar", afirmó recientemente. Tal vez se deba a que siendo joven debió mudarse 18 veces por la labor de su padre y estudiar en 13 colegios distintos.
Su película reciente más importante fue "Don’t Come Knocking" de Wim Wenders, de 2005. Al igual que en la obra maestra "Paris, Texas", Wenders trabajó en el guión con su amigo Shepard y la pareja volvió a estar ante las cámaras después de casi 20 años en la historia de un amor perdido. "Eso hacer surgir un montón de emociones, de las cuales uno ni siquiera sabía que las tenía guardadas", dice. (DPA)







