19 Abril 2009
“Entré en la Argentina y en el mundo en el momento en que uno de los más desaforados proyectos de ingeniería social que imaginó un siglo particularmente fértil en ellos se acercaba a completar la instalación, en las que habían sido las soledades pampeanas, del núcleo de una nación moderna a partir de recursos materiales y humanos importados por igual de ultramar, y tuve además por padres a dos integrantes de la pacífica legión destinada, en la mente de los promotores de ese proyecto, a flanquear con dos maestros cada uno de los soldados convocados a su servicio; y no había dejado atrás mi más temprana infancia cuando esa empresa, que todo anunciaba cercana a alcanzar su triunfal culminación, se desvió de ese rumbo que hasta la víspera había parecido tan seguro, y desde entonces iba a parecer cada vez menos probable que fuera alguna vez capaz de recuperarlo…”.
Tulio Halperín Donghi
(Adelanto completo de Son Memorias en LA GACETA Literaria del 16/11/08)
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