Identifican al nexo entre Forza y los mexicanos

BUENOS AIRES.- Un comerciante fue detenido ayer, acusado de ser intermediario entre dueños de droguerías, entre ellos el extinto empresario Sebastián Forza, y la banda de narcotraficantes mexicanos que fue desbaratada en Ingeniero Maschwitz. Además, se sospecha que tiene vinculaciones con el triple crimen de General Rodríguez, donde fueron asesinados Forza, Leopoldo Bina y Damián Ferrón.El sospechoso es el dueño de un comercio de venta de carne, verduras y artículos de almacén en Villa Devoto. Fue identificado como Armando Giulliani y lo relacionó con la causa un testigo con identidad reservada.
Este sujeto es el detenido número 17 de la causa que lleva adelante el juez federal de Zárate y Campana, Federico Faggionato Márquez, quien lo vinculó con los narcos mexicanos a través del gerente de la banda, el detenido Marcelo Tarzia. Se cree que Guilliani habría sido el intermediario para que los narcos aztecas adquirieran una droguería en el país. Giulliani fue detenido en la madrugada de ayer en su casa de San Martín y luego fue llevado a declarar ante Fagggionato Márquez.
Según fuentes de la investigación, al nuevo sospechoso se lo vincula con la denominada "ruta de la efedrina". Los investigadores llegaron a Giulliani por dos vías: los dichos de un testigo y el seguimiento de un auto Volkswagen Passat que él solía manejar y que fue visto varias veces en la quinta de Maschwitz, donde el cartel mexicano había instalado el laboratorio de metanfetamina más grande de América Latina. El testigo que lo vincula relató que, tiempo atrás, Giulliani y Tarzia participaron de una reunión a la que acudieron también dos personas vinculadas a droguerías. El fin del encuentro era conseguir para los mexicanos, vía Tarzia, una droguería mediante la cual poder acceder directamente a la efedrina. En esa reunión, se mencionó a Forza como posible nexo para conseguir una droguería para los mexicanos, aunque éste no participó del encuentro. Luego, con el correr de la pesquisa, se estableció que Forza, por medio de un testaferro, le había vendido a Tarzia la droguería MegFarm.
Faggionato Márquez ya había citado a declarar a Giulliani, pero en calidad de testigo. En aquella oportunidad admitió que conocía a los mexicanos porque iba personalmente a entregarles comida a la quinta de Maschwitz los martes y jueves. Pero, según las fuentes, se estableció que el auto del detenido había sido visto en ese domicilio otros días, entre ellos un miércoles y el día en que se produjo una explosión en la cocina del laboratorio de drogas, que luego fue desbaratado. (DyN-Télam-NA)