05 Septiembre 2008
En diálogo con LA GACETA Rural, Alejandro Avila, asesor CREA relató su experiencia en el cultivo de arándanos de los grupos NOA. Las primeras reuniones fueron alrededor de setiembre de 2007, donde un grupo de productores compartía sus experiencias sobre cómo manejar y cómo aplicar la tecnología disponible en el cultivo de arándanos. Con ese espíritu de compartir, experimentar y generar información es como en marzo de este año decidieron formar el primer grupo CREA de arándanos del país: CREA Pedemonte.
El grupo esta formado por 10 empresas, con una superficie productiva total de 200 hectáreas distribuidas de sur a norte de Tucumán, en los departamentos La Cocha, J.B. Alberdi, Chicligasta, Monteros y Burruyacu. La zona pedemontana, caracterizada por su exuberante vegetación selvática, aporta sus inmejorables condiciones ambientales para cumplir con los requerimientos ecológicos.
"Trabajar en grupo con una metodología característica de CREA, nos permite identificar rápidamente los problemas y poder actuar en consecuencia, aportando soluciones si las conocemos o investigar aquello que no sabemos, sobre todo en un cultivo que por su reciente expansión tiene muchísimos interrogantes que debemos poder contestarlos", comentó el técnico.
En cuanto a los rendimientos obtenidos en la campaña pasada, Avila dijo que no lo pueden tomar como referencia debido a que las continuas y prolongadas heladas ocurridas, produjeron una disminución considerable de floración y cuaje de frutos, lo que condujo a una caída en los rindes esperados. Las expectativas están puestas en esta campaña que empezará a cosecharse en estos dias del mes en curso, y que tendría su pico de cosecha entre la 3a. y 4a. semana de octubre, según las variedades y tipo de cada campo. En general se ve un excelente desarrollo de la fruta en cuanto a tamaño y cantidad. "Esperamos que el tiempo nos ayude a desarrollar una cosecha continua y sin imprevistos y, además, poder posicionar esta fruta primicia con buenos precios en los mercados mundiales, reflexionó.
El grupo esta formado por 10 empresas, con una superficie productiva total de 200 hectáreas distribuidas de sur a norte de Tucumán, en los departamentos La Cocha, J.B. Alberdi, Chicligasta, Monteros y Burruyacu. La zona pedemontana, caracterizada por su exuberante vegetación selvática, aporta sus inmejorables condiciones ambientales para cumplir con los requerimientos ecológicos.
"Trabajar en grupo con una metodología característica de CREA, nos permite identificar rápidamente los problemas y poder actuar en consecuencia, aportando soluciones si las conocemos o investigar aquello que no sabemos, sobre todo en un cultivo que por su reciente expansión tiene muchísimos interrogantes que debemos poder contestarlos", comentó el técnico.
En cuanto a los rendimientos obtenidos en la campaña pasada, Avila dijo que no lo pueden tomar como referencia debido a que las continuas y prolongadas heladas ocurridas, produjeron una disminución considerable de floración y cuaje de frutos, lo que condujo a una caída en los rindes esperados. Las expectativas están puestas en esta campaña que empezará a cosecharse en estos dias del mes en curso, y que tendría su pico de cosecha entre la 3a. y 4a. semana de octubre, según las variedades y tipo de cada campo. En general se ve un excelente desarrollo de la fruta en cuanto a tamaño y cantidad. "Esperamos que el tiempo nos ayude a desarrollar una cosecha continua y sin imprevistos y, además, poder posicionar esta fruta primicia con buenos precios en los mercados mundiales, reflexionó.
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