20 Junio 2008
El público participa de la degustación de los productos que se elaboran. GENTILEZA PRO HUERTA
La recuperación de materiales genéticos de semillas (arroz, zapallo, papa, tomate) y animal (gallina) son proyectos con avances concretos y palpables que desarrolla el Programa Nacional “Rescate y valorización de especies animales y vegetales para la seguridad alimentaria”, cuyos detalles fueron descriptos por Javier Rovira.
Arroz: Es un alimento que está muy incorporado a la alimentación diaria. La idea es que las familias produzcan arroz.
En Tucumán se produjo arroz hasta la mitad del siglo pasado, donde había una buena producción y molinos de procesamiento, trabajando en sistemas por “inundación”. Pero la producción desapareció por el paludismo.
Hoy el INTA cuenta con la semilla para trabajar en “secano” y con tecnología para desarrollar pequeños procesadoras para proceder al descascarado del grano.
La idea es obtener un alimento de alto valor energético.
Papa: Están incorporando la producción de “papines”, que son papas pequeñas pero de una mayor producción. Se está trabajando en lugares pequeños.
Zapallo: El objetivo es producir los “zapallos criollos”, que son de excelente calidad, para recuperarlos y transformarlos en un elemento de consumo permanente.
La idea es que la gente no consuma únicamente “zapallo plomo” y algunas variedades de “anco”, sino esta nueva variedad.
Desde el INTA buscan que los agricultores produzcan calidad.
Actualmente recuperaron la genética y no necesitan adquirir semillas para desarrollar esta producción regional.
Gallina araucana: Es originaria del sur argentino, rústica, no se enferma y produce huevos verde-azulados. En Famaillá funciona un módulo experimental, en una granja dirigida por el INTA.
Arroz: Es un alimento que está muy incorporado a la alimentación diaria. La idea es que las familias produzcan arroz.
En Tucumán se produjo arroz hasta la mitad del siglo pasado, donde había una buena producción y molinos de procesamiento, trabajando en sistemas por “inundación”. Pero la producción desapareció por el paludismo.
Hoy el INTA cuenta con la semilla para trabajar en “secano” y con tecnología para desarrollar pequeños procesadoras para proceder al descascarado del grano.
La idea es obtener un alimento de alto valor energético.
Papa: Están incorporando la producción de “papines”, que son papas pequeñas pero de una mayor producción. Se está trabajando en lugares pequeños.
Zapallo: El objetivo es producir los “zapallos criollos”, que son de excelente calidad, para recuperarlos y transformarlos en un elemento de consumo permanente.
La idea es que la gente no consuma únicamente “zapallo plomo” y algunas variedades de “anco”, sino esta nueva variedad.
Desde el INTA buscan que los agricultores produzcan calidad.
Actualmente recuperaron la genética y no necesitan adquirir semillas para desarrollar esta producción regional.
Gallina araucana: Es originaria del sur argentino, rústica, no se enferma y produce huevos verde-azulados. En Famaillá funciona un módulo experimental, en una granja dirigida por el INTA.