Cartas de lectores

EXPORTACIONES
Voy a hacer algunos números que son explosivos y que justifican que los economistas “desestabilizadores”, como los llama el Presidente, digan que estamos perdiendo el tren que podría llevarnos a ser nuevamente el gran país que fuimos al comienzo del siglo XX. Exportamos el 80% del maíz, unas 16 millones de toneladas, al precio de U$S 184. En la actualidad hay una enorme demanda insatisfecha de huevo en polvo. Básicamente, la base del huevo son el maíz y la soja, en el 65% y en el 35%, respectivamente. Podemos decir que un kilo de grano produce 150 gramos de huevo en polvo. Si la exportación de maíz la hiciéramos como huevo en polvo, tendríamos que añadirle 8,6 millones de toneladas de soja, que tiene un precio de 320 U$S/tn y estaríamos exportando 3,7 millones de toneladas de huevo en polvo. El precio es de 5.960 U$S/tn. Así que se harían U$S 22.000 millones. La exportación del grano nos hubiera dado U$S 5.700 millones. La diferencia es del 285%, y en dólares, de U$S 16.000 millones. Estos números se podrían repetir con la carnes vacuna, aviar y porcina, y con la leche. Haciendo esto no creceríamos al 9%; lo haríamos al 50%. En la actualidad la industria del huevo en polvo no tiene ni crédito a mediano plazo. Le digo al señor Presidente que, en vez de pelearse desde el atril de la Casa  Rosada con Dios y con medio mundo, de mentir con los datos del Indec, de ponerle trabas al campo, de controlar los precios, de no controlar la  inflación, la seguridad, la educación, de comprar gobernadores e intendentes, de subvencionar el transporte de los porteños, de aislarnos del mundo, ¿por qué no gobierna para que exportemos los granos como proteína animal?



ANIMALES SUELTOS
En respuesta a la carta “Por qué hay tantos perros sueltos en Tucumán”, deseo responder a su autora.  Estos perros son abandonados. Alguna vez fueron cachorros que despertaron la sonrisa de un niño, con el beneplácito de la familia que lo adoptó. Como a todo ser viviente, la naturaleza lo hizo crecer y lo convirtió en adulto. Es evidente que fue en ese momento cuando la familia se deshizo de él, despojándolo del hogar (el perro es un animal doméstico) y por ese motivo comenzó a transitar por las calles, sin cuidados ni alimentos. Hay un organismo que se ocupa de estos animales. Se llama Cenara (Centro de Adopción y Reubicación Animal). Funciona en  la avenida Francisco de Aguirre 1.550 de nuestra ciudad. Es un albergue de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, que tiene una población de alrededor de 400 animalitos, entre perros y gatos. Considero que lo importante sería tomar conciencia de que cuando se adopta un animal, hay que comprometerse y responsabilizarse de esa decisión.  Estoy convencida de que esta sería la solución, en lugar de instalar una “perrera”, que sólo haría crecer el número de animales en situación de que sean albergados por el Cenara.



ESCUELA SARMIENTO
Ante la nueva etapa que iniciará el Gobierno de la provincia, llevando voces y anhelos de miles de sarmientinas, reiteraré lo tantas veces solicitado a las autoridades gubernamentales: volver la mirada al centenario solar de la Escuela y Liceo Vocacional Sarmiento, para decidir conformar nuevamente, en una sola unidad, el edificio de Rivadavia 25 (Legislatura) y Rivadavia 29 (escuela). De esta manera, se daría cumplimiento a los objetivos con los que fueron fundados. Innumerables planes en áreas pedagógicas, culturales y recreativas -constantemente bregando por la excelencia educativa- se ven anulados en su realización por la falta de espacio. Hoy, cuando la educación ocupa un lugar de privilegio en todo proyecto de gobierno, concretar este anhelo será un acto de justicia imposible de soslayar.



NORMAS DE TRANSITO
Hace varios meses publicaron en LA GACETA una nota en la que se hacía referencia a lo peligrosos que son los autos viejos que todavía circulan por calles y rutas de Tucumán. En ella, se publicó la foto de mi auto, modelo 78, sin saber en realidad las condiciones en las que se encuentra mi vehículo. Sin embargo, todos los días veo en el microcentro taxis y remises que estacionan en doble y hasta en triple fila; que no ponen el guiño para doblar; que ocupan la senda peatonal en los semáforos y que se encuentran, de chapa al menos, en peores condiciones que mi viejo auto. ¿No son acaso estas transgresiones a las que aludo mucho más peligrosas que un auto viejo que circula con todo en orden y que además respeta al peatón y todas las señales de tránsito?



ELECCIONES
Si bien no es novedad, siempre es bueno tener claro que el espesor de una misma moneda con dos caras se funde en la idiosincrasia imperialista de la ultraderecha o de la ultraizquierda, que conlleva como meta final la dominación del pueblo, comúnmente identificado como masas. Los argentinos, en su inmensa mayoría individuos pensantes y sabedores de lo que se hace -no como algunos piensan-, tamizan sus decisiones en el momento de tomarlas. Nuestro pueblo busca el equilibrio adecuado entre esos dos extremos. Por ello es buena cosa que nuestros candidatos a la presidencia de la Nación sean dueños de una capacidad de exposición honesta de sus planes futuros de gobierno, en todos los ámbitos del quehacer de nuestra Nación. Que tengan claro el espacio que ocupamos o que deberíamos ocupar como región, dentro del contexto mundial. Buena cosa será también que no se dejen seducir por los cantos de sirena del Primer Mundo. Primer Mundo para con sus patrias. Sentarse en las mesas de negociaciones sabiendo que realmente son una fuerza material mayor que nosotros, pero con capacidad de negociar adecuadamente, con respeto. Nunca deben olvidar que son una prolongación nuestra, del pueblo que los elige. Deben prevalecer el espíritu y la dignidad, algo que no vende, porque no se vende; ello es la base de todo triunfo a largo plazo. Nuestra patria va despertando del letargo de los pueblos. Sigamos enalteciéndola, sabiendo manejar nosotros nuestro propio rumbo. Que brille nuestra mirada con la sonrisa del corazón, que dice: “trabajando, con la ayuda de Dios, todo lo lograremos”.



JUSTICIA SOCIAL
El trabajo dignifica al hombre cuando percibe su sueldo, y lo humilla cuando no cobra por lo que realiza. Digo esto porque parece que el gobernador y su gabinete desconocen o no tienen tiempo para firmar decretos que permitan al personal auxiliar de las escuelas, designados por resolución, percibir sus sueldos. ¿Justicia social? ¿Trabajar y no cobrar? Los que trabajan necesitan cobrar sus sueldos; es lo justo. ¿O el gobernador prefiere las escuelas sucias o que la limpien los alumnos, como sucedía en algunos establecimientos y aún hoy sucede en otros? Confiamos en el gobernador; por eso lo elegimos. ¿Acaso nos equivocamos?