En la Argentina, la segunda causa de muerte son las armas de fuego. Con esta premisa, el Gobierno Nacional pondrá en marcha mañana el programa voluntario de desarme, con el cual pretende bajar los índices delictivos en el país. El plan consiste básicamente en la entrega de armas a cambio de dinero.
Durante el lanzamiento del plan en Buenos Aires, que fue encabezado por el ministro del Interior, Aníbal Fernández, se leyó un informe de la Red para el Desarme (ONG que apoya la iniciativa), según el cual "en uno de cada diez hogares argentinos hay un arma de fuego, y el 65% de las muertes causadas por su uso ocurren en accidentes, suicidios y conflictos interpersonales". "El peor de los errores es comprar armamento suponiendo que es la forma de proteger a la familia contra la inseguridad", subrayó el ministro y añadió que antes, de la reglamentación de este plan de entrega, ya fueron depositadas 4.000 armas -para su destrucción- en dependencias estatales.
El pago del incentivo se efectuará a través de cheques del Banco de la Nación Argentina al portador, sin indicación del beneficiario y con leyenda preimpresa "Ley 26.216". El cobro en ventanilla podrá hacerse en cualquiera de las sucursales del Banco Nación y no se requerirá identificación.
Aniversario
El programa será presentado oficialmente en la ciudad bonaerense de Necochea. Del acto participarán a los padres de Alfredo Marcenac, el chico que fue asesinado hace un año por un joven que abrió fuego sobre un grupo de transeúntes en el barrio porteño de Belgrano. Según la causa judicial, si el Registro Nacional de Armas (Renar) hubiera llevado a cabo una política de control activo, el joven estudiante de Necochea quizás estaría vivo.
El director del Renar, Andrés Meiszner, admitió que es imposible saber cuántas armas circulan ilegalmente en la Argentina. "Ya sabemos que los delincuentes no van a participar de este plan; esto no tiene nada que ver con la delincuencia. Pero de alguna manera puede ayudar a que indirectamente mejore la situación de inseguridad, porque es un hecho que cuando un ladrón entra a una casa y encuentra un arma, se la lleva", aseguro el funcionario.
En la Argentina, 1.250.000 armas están legalmente en manos de unos 600.000 civiles (no se cuentan las que están en poder de las fuerzas de seguridad). El 35 % de esos usuarios tiene más de diez armas en su poder. Pero se trata sólo de las registradas. "El problema se agrava si uno considera que, al menos desde que la Nación se hizo cargo del órgano administrativo que debe fiscalizar las armas, nunca hizo un inventario sobre cuánto armamento realmente existe en el país", indicó Meiszner.
En Tucumán
En la provincia el plan también se implementará. El viernes se llevó a cabo una reunión entre el ministro de Seguridad Ciudadana, Mario López Herrera, y el delegado del Renar en Tucumán, Luis Sal Area, durante la cual debatieron diferentes puntos del plan; también se acordó en la necesidad destruir de armas, algo que no sucede desde hace cinco años. En la delegación Tucumán del Renar se colocará una guardia policial permanente para preservar la seguridad de quienes concurran allí para entregar sus armas.