27 Marzo 2003
El sudor es el mecanismo que el cuerpo tiene para mantener estable su temperatura. Por eso es normal y sano que -en épocas de más calor- aumente la transpiración, aunque la sensación del cuerpo sudado y el olor que se genera, culturalmente se haya convertido en cosas muy desagradables.
Los humanos tenemos dos tipos de glándulas sudoríparas: glándulas ecrinas, que sueltan un liquido salado para bajar la temperatura del cuerpo y se encuentran en todo el cuerpo y glándulas apocrinas, que sueltan una sustancia lechosa que regula el sudor.Las glándulas ecrinas, se encuentran en las axilas y alrededor de los genitales. A partir de la pubertad, estas glándulas se vuelven mucho mas activas. Pero el sudor siempre es inodoro. La flora bacteriana de la piel es la que - al degradar el sudor- produce las sustancias volátiles causantes del mal olor. Es por ese motivo que muchos desodorantes que contienen una elevada concentración antibacterias pueden producir irritaciones, alergias o incluso sobreinfecciones bacterianas al destruir la flora natural de la piel.Para evitar el sudor y el mal olor es necesario seguir una estricta conducta higiénica y tener en cuenta que algunos alimentos favorecen la transpiración fuerte.
* No conformarse con la ducha diaria, y no dudar en darse más baños si se suda en exceso.
* Lavar la ropa regularmente. La misma flora bacteriana de la piel también puede vivir en la ropa sudorosa y mantener el olor vivo.
* Usar productos específicos. Los desodorantes cubren olores malos con olores buenos y los antitranspirantes impiden temporalmente que la bacteria se introduzca en las glándulas, frenando el sudor.
* Aplicar talco después del baño en los lugares donde más se suda, como las axilas. Este producto absorbe el sudor, ayuda a mantener la piel seca y previene el crecimiento de la bacteria.
* Disminuir el consumo de cafeína. Algunas gaseosas, el café, el té, el chocolate y otras comidas y bebidas con cafeína causan que las glándulas apocrinas se vuelvan mas activas.
* Lo que se ingiere afecta al olor corporal, por ello es importante mantener una dieta equilibrada. Comer más frutas y verduras, y tomar dos litros de agua cada día.
* Si el mal olor persiste, visitar al dermatólogo, para descartar la existencia de hongos.
Los humanos tenemos dos tipos de glándulas sudoríparas: glándulas ecrinas, que sueltan un liquido salado para bajar la temperatura del cuerpo y se encuentran en todo el cuerpo y glándulas apocrinas, que sueltan una sustancia lechosa que regula el sudor.Las glándulas ecrinas, se encuentran en las axilas y alrededor de los genitales. A partir de la pubertad, estas glándulas se vuelven mucho mas activas. Pero el sudor siempre es inodoro. La flora bacteriana de la piel es la que - al degradar el sudor- produce las sustancias volátiles causantes del mal olor. Es por ese motivo que muchos desodorantes que contienen una elevada concentración antibacterias pueden producir irritaciones, alergias o incluso sobreinfecciones bacterianas al destruir la flora natural de la piel.Para evitar el sudor y el mal olor es necesario seguir una estricta conducta higiénica y tener en cuenta que algunos alimentos favorecen la transpiración fuerte.
* No conformarse con la ducha diaria, y no dudar en darse más baños si se suda en exceso.
* Lavar la ropa regularmente. La misma flora bacteriana de la piel también puede vivir en la ropa sudorosa y mantener el olor vivo.
* Usar productos específicos. Los desodorantes cubren olores malos con olores buenos y los antitranspirantes impiden temporalmente que la bacteria se introduzca en las glándulas, frenando el sudor.
* Aplicar talco después del baño en los lugares donde más se suda, como las axilas. Este producto absorbe el sudor, ayuda a mantener la piel seca y previene el crecimiento de la bacteria.
* Disminuir el consumo de cafeína. Algunas gaseosas, el café, el té, el chocolate y otras comidas y bebidas con cafeína causan que las glándulas apocrinas se vuelvan mas activas.
* Lo que se ingiere afecta al olor corporal, por ello es importante mantener una dieta equilibrada. Comer más frutas y verduras, y tomar dos litros de agua cada día.
* Si el mal olor persiste, visitar al dermatólogo, para descartar la existencia de hongos.
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