Una araña busca salvar a un cerdo que tiene los días contados

En “La telaraña de Charlotte”, Fern Arable (Dakota Fanning) decide salvarle la vida a Wilbur, un cerdito rosado a punto de convertirse en un lechón asado.
Esta divertida producción, realizada con actores y animales reales, cuenta con las voces de famosos como Julia Roberts, Oprah Winfrey y Robert Redford.
La historia, que ya ha sido llevado a la pantalla chica por la productora Hanna-Barbera en 1972,  está basada en el bestseller infantil “Charlotte‘s Web”, el inmortal clásico escrito por Elwyn Brooks White (también autora de “Stuart Little”) e ilustrado por Garth Williams en 1952, del que se han vendido más de 45 millones de copias en todo el mundo y que ha sido traducido a 23 idiomas.
Este es un clásico relato de lealtad, confianza y sacrificio en el que el cerdito Wilbur traba amistad con una araña llamada Charlotte. Su relación sirve de inspiración a los animales que les rodean para actuar como una auténtica familia. Así, al enterarse de que Wilbur tiene los días contados, Charlotte tejerá palabras con su telaraña para convencer al granjero de que Wilbur es un cerdo que merece salvarse.
Dakota Fanning, que con sólo 12 años ya tiene una carrera bastante consolidada tanto en producciones para televisión como para la gran pantalla (como “La Guerra de los Mundos”), interpretará a la niña que cría a Wilbur. 
Resulta atractivo cómo desde un guión sólido, de Susana Grant y Karey Kirkpatrick, se las ingeniaron para otorgarle tanta presencia a un personaje difícil de antropomorfizar como una araña, con un despliegue de por sí limitado en el espacio bien resuelto por la ajustada dirección de Gary Winick.
Cada animal cuenta con una personalidad, (en la versión original las voces de la araña Julia Roberts, el caballo Robert Redford y la rata Steve Buscemi, entre otros ) y a diferencia de otros productos -que tienen a animales como protagonistas- no abruma la pantalla con gestos exagerados ni con excesivos despliegues.
Si bien la esfera de la acción dentro del ámbito de la granja se ve reducida, la incorporación de una rata, cuyas peripecias y habilidades dotan de velocidad al desarrollo de la trama, consigue hacer de este filme orientado exclusivamente a la platea de los niños una película interesante y de gran frescura.