Hay 227 chicos que viven sin su libertad

Muchos niños comienzan en la Sala Cuna y terminan en el instituto Belgrano, sin haber conseguido una familia. Las políticas públicas no logran dar las respuestas necesarias.

EN SOLEDAD. Muchos niños se hacen adultos en los institutos de menores, como le ocurrió a Juan. LA GACETA / FRANCO VERA EN SOLEDAD. Muchos niños se hacen adultos en los institutos de menores, como le ocurrió a Juan. LA GACETA / FRANCO VERA
19 Noviembre 2006
En Tucumán, donde 370.000 personas viven debajo de la línea de pobreza, las políticas públicas no alcanzan para contener las necesidades de las familias; sobre todo, la de 227 chicos, que viven en institutos de menores. Sólo 36 adolescentes está internados en el Roca por causas legales. El resto responde a "razones asistenciales", entre las que se encuentran el abandono, la extrema pobreza y el abuso sexual. Muchos de ellos, comienzan su carrera institucional en la Sala Cuna, y van pasando por distintos hogares hasta que alcanzan la mayoría de edad.
LA GACETA realizó un estudio sobre la realidad de los institutos y los programas alternativos a la internación, que ya comenzaron a aplicarse en la provincia, a través de la Secretaría de Políticas Sociales. La investigación se hizo en el marco de la Red de Diarios en Periodismo Social, que integra junto a un grupo de diarios del interior, que también editó notas del mismo tenor. Por ejemplo, en Córdoba, hay más de 3.400 chicos en institutos porque sus familias no pueden tenerlos.