03 Septiembre 2006
EN EL TALLER. Malas Lenguas ensaya en el barrio Lola Mora, donde muchos vecinos son parte de la gran familia del “rocanrol”. (LA GACETA/Franco Vera)
Cada barrio tiene una historia para ser contada, y el rock se apoderó de esa idea. A partir de ahí, surgió un sub estilo específico, creado por chicos que crecieron en los barrios y que quieren contar lo que les pasa, a su modo. El mercado argentino está lleno de retoños, con bandas que se convirtieron en referentes de este estilo: Intoxicados (que antes fueron Viejas Locas), La 25, Pier, Callejeros, Villanos, Los Tipitos... siempre con Los Redondos como la máxima expresión del rock popular y masivo. Así como se extendió con sus códigos y bases rítmicas distintivas, llegó a Tucumán y se convirtió en la única movida nacional que tiene su sucursal en la provincia, con Malas Leguas como principal exponente. Como ocurre con las bandas nacionales, los "stones" locales tienen un gran "aguante", convocan a multitudes y formaron sus propias "familias" en torno de la música.
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