De acuerdo con los datos oficiales, la fuerza laboral del Gran San Miguel de Tucumán está integrada por 273.650 personas. De ese total, el 50% no está registrado como empleado, es decir que no goza de beneficios jubilatorios ni cuenta con la cobertura de una obra social.
El índice de empleo en negro sigue siendo elevado en Tucumán. Afecta a 136.825 habitantes del aglomerado urbano, pese a que desde el Gobierno anunciaron que pusieron en práctica una serie de medidas para combatir el empleo en negro.
Con el crecimiento de la economía argentina, el nivel de empleo en la provincia mejoró en casi tres puntos porcentuales. Desde el Gobierno evaluaron que existe más actividad, sobre todo en sectores vinculados con la construcción y con los servicios.
Sin embargo, aclaran que aún existe la conducta de no registrar a los trabajadores. “Muchos empresarios tienen, todavía, temor a lo que sucederá con la economía del país. Esos temores del sector privado se evidencian en el mercado de trabajo provincial, en particular, con la toma de empleados en negro”, razonó una fuente del Poder Ejecutivo ante la consulta de LA GACETA.
Más allá de esta situación, en el Gobierno están conformes con la evolución de los indicadores. Según el último dato de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), difundida por el Ministerio de Trabajo de la Nación sobre los informes de la Dirección Provincial de Estadística, en el último año, el sector privado generó unos 5.100 puestos de trabajo formales.
Los sectores que más generan manos de obra en Tucumán siguen siendo los de la construcción, el comercio en general y la industria manufacturera, según la encuesta que las áreas oficiales realizan en distintas empresas tucumanas.