Para la elaboración de la cocaína se trasforman las hojas de coca en pasta de coca y esta, en clorhidrato de cocaína.
Tras macerar en agua las hojas de coca y tratarlas con solventes y ácido sulfúrico, sobre todo, se obtiene la pasta de coca. La pasta de coca se fuma y es muy peligrosa, debido a la enorme cantidad de impurezas y adulterantes que contiene.
Complementos
El clorhidrato de cocaína es el polvo blanco que comúnmente se llama cocaína, y la base libre de cocaína se obtiene desde el clorhidrato, añadiendo éter y sometiéndolo a calor elevado. A su vez, el crack se obtiene añadiendo bicarbonato sódico, amoníaco y agua a temperatura moderada. Ademas de aumentar su volumen, se la potencia con anfetaminas, estricnina, quinina, ácidos básicos, detergentes, formol, etc. Esto es lo que comunmente se denomina "estirarla" o "cortarla".
Difícilmente se halla en su fórmula química original; el estado de pureza fluctúa entre un 5% y un 50%.
Hay que tener en cuenta que tanto en el caso de la cocaína, como en otras drogas, la adulteración suele ser aún más perjudicial que la droga en sí.