Buenos Aires.- El ministro del Interior, Aníbal Fernández, negó hoy diferencias entre la Casa Rosada y el ministro de Economía, Roberto Lavagna, a raíz de la política salarial y en ese sentido afirmó que el presidente Néstor Kirchner "no es alguien que esté estancado en una década determinada".
Fernández hizo alusión, así, a las afirmaciones de Lavagna en contra de un aumento salarial por decreto. El titular del Palacio de Hacienda había cuestionado lo que llamó "el populismo setentista", en alusión a incrementos de sueldos sin respaldo fiscal.
Para algunos, las palabras de Lavagna parecieron ir no sólo destinadas a Kirchner, a quien se le atribuyen posiciones setentistas, sino a anteriores aumentos de sueldos y jubilaciones otorgadas en diciembre pasado.
"El Presidente no es alguien que esté estancado en una década determinada. El Presidente tiene una visión muy dinámica de la economía y de las políticias que se deben aplicar en un país en el que está todo por hacer, después de la fenomenal crisis del 2001, con lo cual, ninguna de esas opciones pueden ser motivadoras de un enojo del Presidente", dijo Fernández a Canal 13.
Por otra parte, el titular de la cartera política aclaró que "nunca puede haber, por definición literal" una disputa de poder entre Kirchner y Lavagna "porque el único que toma decisiones políticas es el Presideate de la nación", recordó Fernández.
Según dijo, "el propio ministro Lavagna, cada vez que lleva adelante una estrategia política en el marco de la economía nacional, es una vez que fue aprobada por el propio Presidente de la nacion, así que nunca puede haber una disputa, porque el único habilitado y el único que toma decisiones en este gobierno es el Presidente de la nación", insistió.
En cuanto a la polémica en sí, Fernández consideró que las declaraciones del Ministro "en algún sentido coinciden con el pensamiento del Gobierno". En ese sentido, Fernández afirmó que "no se pueden repartir beneficios sin riquezas". (DyN).