Kimi Antonelli fue amenazado de muerte tras el GP de Qatar y desató un escándalo que sacude a la Fórmula 1
Más de 1.100 mensajes agresivos inundaron las redes del joven piloto italiano después de la carrera en Lusail. Mercedes pidió la intervención de la FIA y Red Bull reconoció que sus insinuaciones fueron incorrectas.
ESCÁNDALO. Antonelli fue blanco de una ola de agresiones digitales tras la maniobra que lo dejó sin el cuarto puesto en Qatar. Mercedes llevará el caso a la FIA.
La antesala de la definición del campeonato de la Fórmula 1 quedó atravesada por un hecho muy grave. Kimi Antonelli, piloto de Mercedes y una de las grandes promesas de la categoría, recibió amenazas de muerte y una ola de odio digital tras el Gran Premio de Qatar. En apenas 24 horas, sus redes sociales fueron inundadas con más de 1.100 mensajes abusivos, incluyendo agresiones homofóbicas y amenazas directas, después de que desde Red Bull se sugiriera que el italiano había dejado pasar deliberadamente a Lando Norris.
Todo se originó en una maniobra sobre el final de la carrera en Lusail. Antonelli peleaba por el podio frente a Carlos Sainz cuando, en la curva 9, tuvo un descontrol que lo dejó al límite de perder el auto. Llegó pasado a la curva 10, perdió el tren trasero y terminó yéndose a la zona de escape. Ese error permitió que Norris lo superara para quedarse con el cuarto puesto y, con él, una ventaja clave en la lucha por el título.
Durante la transmisión, el ingeniero de Max Verstappen deslizó por radio que el italiano “parecía haberlo dejado pasar”. Minutos después de la carrera, Helmut Marko, asesor de Red Bull, declaró que había sido “demasiado obvio” que Antonelli había “saludado” para facilitar el adelantamiento del británico. La frase recorrió el paddock con una velocidad feroz y derivó en una reacción violenta e injustificada en redes sociales contra el debutante de Mercedes.
Los registros internos del equipo reflejan la magnitud del ataque ya que los mensajes abusivos aumentaron un 1.100% respecto de un domingo habitual, y otros 330 comentarios similares llegaron a las cuentas oficiales de Mercedes. Como gesto de rechazo ante la agresión, Antonelli apagó su foto de perfil y la dejó completamente negra.
La evidencia, sin embargo, despejó cualquier especulación. Según análisis de medios especializados, tanto la telemetría como las imágenes on board muestran que el piloto perdió el control al entrar más rápido que en la vuelta anterior, afectado por el aire sucio y los neumáticos calientes. No hubo maniobra deliberada, fue un error técnico en una zona crítica del trazado.
La situación obligó a Mercedes a actuar institucionalmente. El equipo reunirá pruebas y presentará el caso ante la FIA, que impulsa la campaña “United Against Online Abuse”, aunque el organismo todavía no se expresó públicamente. Red Bull, por su parte, emitió un comunicado en el que reconoció que sus comentarios previos y posteriores al GP de Qatar fueron “claramente incorrectos”, aunque sin una disculpa directa hacia Antonelli. La única disculpa explícita llegó de parte de Marko, que pidió perdón ante un medio alemán.
Toto Wolff, jefe de Mercedes, reaccionó con dureza a las insinuaciones. “Es un disparate total. Kimi estaba peleando por un podio. ¿Cómo se puede creer algo así?”, expresó, molesto tanto por las declaraciones de Red Bull como por el episodio radial del ingeniero de Verstappen. Según explicó, la situación se aclaró en persona después de la carrera.
El escándalo estalló, además, en un contexto de máxima tensión deportiva. Norris, Verstappen y Oscar Piastri llegan con chances de ser campeones en Abu Dhabi, y el adelantamiento al italiano permitió que el británico ampliara su ventaja a 12 puntos frente al neerlandés. La batalla entre Mercedes y Red Bull, histórica y siempre al límite, volvió a encenderse.
El caso expone un límite que la categoría deberá abordar con urgencia. La agresión contra Antonelli tras un error competitivo, producto de una mala entrada en curva en un momento de alta exigencia, desnudó la fragilidad del debate digital y obligó a equipos, organismos y fanáticos a revisar cómo se convive en un deporte que cada vez se define tanto en la pista como en la arena pública.






