Las pericias para determinar la causa del devastador incendio en el complejo industrial de Ezeiza, que arrasó con varias empresas y generó preocupación en los barrios aledaños, comenzarán previsiblemente el lunes, una vez que el fuego esté completamente extinguido.
La fiscal Florencia Belloc, a cargo de la UFI 1 de Ezeiza, lidera la investigación judicial para esclarecer el origen del siniestro, ocurrido anoche en una zona industrial abierta adyacente a la autopista Buenos Aires-Cañuelas.
El fuego se originó en un depósito de la empresa Logischem, donde una explosión provocó la propagación de las llamas a otras compañías, como Iron Mountain, Larroca Minera, Almacén de Frío, Aditivos Alimentarios y Sinteplast.
Trabajaron 70 dotaciones de bomberos
Un operativo de emergencia sin precedentes, que involucró a más de 900 personas y 70 dotaciones de bomberos, se desplegó para combatir el fuego. Participaron las policías Federal y Bonaerense, ambulancias del SAME provincial, la Cruz Roja y equipos de servicios sociales del Ministerio de Seguridad de PBA.
Si bien las autoridades descartaron la presencia de una nube tóxica, advirtieron sobre la presencia de partículas suspendidas en el aire que podrían causar afectaciones en caso de exposición continuada.
Las llamas comenzaron en el depósito químico de Logischem y luego se extendieron hacia Iron Mountain, afectando también otras dos empresas del polígono industrial, ubicado a ambos lados de la colectora de la autopista Ezeiza-Cañuelas.
Los daños materiales son evidentes: hierros retorcidos, montañas de escombros, techos colapsados y muros derruidos. Plásticos deformados fueron hallados a más de doscientos metros del epicentro.







