Los recientes posteos de Britney Spears y el estado de su residencia en California volvieron a encender las alarmas en su círculo más cercano. Según allegados citados por medios estadounidenses, la cantante vive en medio de un profundo desorden y rodeada de excrementos de perro, lo que remite a episodios pasados de inestabilidad.
“Están aterrorizados por su futuro”, aseguró un allegado a la artista de 43 años en declaraciones a Daily Mail, retomadas por PageSix. “Está atravesando un episodio ahora mismo, y vamos a verla luchar contra él como lo ha hecho durante años”, añadió. Aunque confirman que está siendo monitoreada, descartan por ahora una intervención directa.
Parte de esta preocupación se debe a las imágenes que la propia Spears comparte en redes sociales. El mes pasado publicó un video bailando en su mansión de Thousand Oaks, California, rodeada de un evidente desorden y lo que parecía ser excremento de perro en el piso. “Jugando con la iluminación y limpiando mi casa como si no hubiera un mañana”, escribió en ese posteo.
Más recientemente, la cantante subió otro video desde el baño de un restaurante, en medio de lo que describió como una “cita fallida”. Allí se mostró con un vestido lencero negro corto con detalles de encaje, realizando movimientos sensuales frente a la cámara, levantándose la prenda y exhibiendo parte de su cuerpo.
Una vida marcada por altibajos
Britney Spears ya había expuesto en su libro de memorias, “The Woman In Me”, los episodios dolorosos de su vida: desde los conflictos con la tutela de su padre hasta las presiones de la fama y sus relaciones sentimentales. Allí también explicó el sentido de sus posteos subidos de tono, que para muchos resultan polémicos.
“Sé que mucha gente no entiende por qué me encanta hacerme fotos desnuda o con vestidos nuevos. Pero creo que si hubieran sido fotografiados miles de veces por otras personas, entenderían que me da mucha alegría posar como me siento sexy y hacerme mis propias fotos”, escribió la intérprete de Baby One More Time.
Entre la libertad y la preocupación
Tras haber recuperado su autonomía luego de años de tutela, Spears busca reafirmar su identidad y defender su libertad de expresión en redes sociales. Sin embargo, el estado de su hogar, sumado a sus publicaciones erráticas y su estilo de vida sin rutinas claras, generan inquietud en su entorno.
Mientras su círculo íntimo insiste en que “no está nada bien”, la cantante continúa mostrando al mundo sus momentos más personales, en un equilibrio frágil entre la búsqueda de autenticidad y las sombras de su pasado.






