Por Micaela Pinna Otero
05 Septiembre 2025
AGLOMERACIÓN. Según relataron los vecinos, los adolescentes suelen realizar su recorrido a la tarde noche.
Vecinos del microcentro expresaron su descontento ante un grupo de adolescentes que desde hace algunos meses se aglomeran en las plazas principales de la Capital y generan disturbios al andar de manera desprevenida y sin respetar las normas de tránsito. El secretario de Tránsito de la Municipalidad informó que están trabajando en la prevención de ese accionar junto al Centro de Monitoreo para llevarles tranquilidad a los vecinos. En la Dirección de Distritos Urbanos explicaron que al tratarse de menores de edad, y al no estar cometiendo ningún delito, la Policía no puede sancionar o detener a los ciclistas.
Según contaron los vecinos en las reiteradas quejas a LA GACETA, se trataría de aproximadamente 30 adolescentes que desde principios de año se reúnen en la plaza Independencia durante las tardes, especialmente los viernes y fines de semana, y se trasladan en manada por las calles aledañas, como la 25 de Mayo, la Laprida o la 24 de Septiembre, para dirigirse hacia la plaza Urquiza o barrio Sur.
La preocupación de los capitalinos no se basa únicamente en que las plazas y arterias principales de la ciudad sufren una gran convulsión, sino que los jóvenes ponen en riesgo su integridad física y las de los peatones y automovilistas que circulan por la vía pública, debido a que no respetan los semáforos ni las normas de tránsito.
RUTA. El grupo circula desde la plaza Independencia hacia la Urquiza.
“Un miércoles a la noche, cruzaba la calle junto con mi madre desde la plaza Independencia hacia la Iglesia Catedral, cuando el semáforo estaba en rojo y, sin embargo, casi nos atropellan unos adolescentes que circulaban en bicicletas con mucha velocidad que daban vueltas a la plaza. Ante esto me puse muy nerviosa y les reclamé que debían respetar las normas de tránsito. Por supuesto, respondieron con indiferencia a mis reclamos”, escribió Eugenia Herrera en una carta enviada a LA GACETA.
“Da pánico tener que movilizarte por el microcentro. Quienes vivimos por la zona presenciamos constantemente episodios que dan miedo. Hacen piruetas en la bici, pasan semáforos en rojo; cuando vas manejando no sabés si se te van a cruzar y cuando estás caminando vas con miedo y cuidado porque también se suben a las veredas”, contó L.D., quien vive a pocos metros de la plaza Independencia.
“Es un milagro que todavía no haya ocurrido una tragedia. Se meten entre medio de los autos, van sin cascos y hacen wheelie. Es realmente un peligro, primero para ellos porque pueden tener un accidente grave al ir sin protección, pero también lo es para los que circulamos en vehículos. Por esquivarlos a ellos podemos provocar un choque o llevarlos puestos con las bicis y nos comemos ese mal momento sin quererlo”, dijo María Atim.
Sin represalias
Un aspecto que molesta a los ciudadanos es el hecho de sentirse desprotegidos. “Pareciera que se manejan con total impunidad porque nadie puede hacerles nada. Los padres de estos chicos no deben tener ni idea de lo que están haciendo; deberían hacerlos responsables a ellos”, opinó María. “Cada vez que hablamos con los policías que están en las calles ellos nos dicen que no pueden hacer mucho más que disuadirlos y separar los grupos; el tema es que hacen un par de cuadras y ya se vuelven a juntar”, añadió L.D.
El jefe del Primer Distrito Urbano, Luis Petre, explicó que es complejo poder intervenir en este tipo de casos ya que se trata de menores de edad. “Nosotros no podemos detenerlos o traerlos hacia la dependencia policial; no estamos autorizados. Eso es algo que en todo caso le correspondería al Centro de Atención de Derivación de Menores, pero sólo si existiese una causa procesal, lo cual no es el caso de estos chicos; ellos no están cometiendo ningún delito”, dijo.
El comisario indicó que hay una ordenanza municipal en la cual se establecen las reglas que deben cumplir los ciclistas a la hora de circular. “La verdad es que quien tiene que tomar más cartas en el asunto es la Patrulla de Protección Ciudadana (PPC) de la Municipalidad y hacer cumplir esta ordenanza. Sabemos que es un peligro que estos chicos circulen así. Por nuestra parte, desde la Policía, andamos de niñeros; les llamamos la atención y los separamos, pero se nos ríen en la cara porque saben que no les podemos hacer nada”, agregó.
El director de la Patrulla de Protección Ciudadana, Rolando Gómez, en comunicación con LA GACETA, sostuvo que la problemática no le compete a la PPC, sino a la Dirección General de Tránsito.
José María Mansilla, director general de Tránsito Municipal, por su parte, aseguró que están atendiendo el asunto en colaboración con el Centro Municipal de Monitoreo. “El COMM va trazando la línea de tiempo real; cuando el personal ve que los chicos empiezan a aglomerarse y a realizar sus rondas habituales se activa la cadena de prevención que está realizada por la PPC. La idea es trabajar principalmente los aspectos preventivos de esta situación”, dijo.
“Lo que pasa en la plaza Independencia es una situación que roza el vandalismo. Desde el área de Tránsito estamos muy atentos y cada vez que tenemos la posibilidad enviamos a nuestros agentes de tránsito, que son fedatarios públicos y pueden documentar el hecho en flagrancia en la vía pública. El problema es que no hay un marco regulatorio para documentar este tipo de infracciones”, señaló.
Mansilla explicó que actualmente existen normas en el Código de Tránsito que regulan el uso de las bicicletas, pero dijo que “aún con estas leyes, Tránsito no tiene posibilidad ni siquiera de generar un decomiso de ese tipo de vehículos porque el marco regulatorio de la infracción no ha sido reglamentado”.
El otro inconveniente que se les presenta es la edad de los ciclistas. “No podemos tener ninguna intervención al tratarse de menores de edad. Debería el Ministerio de Seguridad tomar intervención, pero aún así es muy difícil en el hecho flagrante tomar alguna determinación ante menores de edad. De todas formas nosotros seguiremos trabajando para avanzar con nuestro marco regulatorio y atender las quejas de los vecinos”, afirmó.
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