Cómo es el departamento donde vive Mirtha Legrand a sus 98 años
A sus 98 años, Mirtha Legrand continúa siendo sinónimo de elegancia y sofisticación. Esa impronta, construida a lo largo de casi un siglo de trayectoria artística y televisiva, también se refleja en el lugar que eligió para vivir. Desde hace más de tres décadas, la diva de los almuerzos reside en un departamento ubicado en una de las zonas más distinguidas de la Ciudad de Buenos Aires, un espacio donde cada rincón habla de su historia personal y de su estilo inconfundible.
Un hogar clásico y luminoso
La vivienda cuenta con ambientes amplios y ventanales que permiten la entrada de luz natural, potenciando la calidez de cada espacio. La decoración afrancesada, con muebles de época y detalles de distinción, reafirma el sello clásico que caracteriza a la conductora.
El living principal es uno de los espacios más emblemáticos. Allí conviven sillones de tres cuerpos en tonos neutros, alfombras clásicas y delicados almohadones. Fotografías familiares enmarcadas, esculturas y veladores antiguos completan la atmósfera, mientras las paredes exhiben obras de artistas como Alejandro Debonis, Basaldúa, Lescano y Soldi.
Un comedor pensado para recibir
Otro de los ambientes destacados es el comedor, presidido por una mesa de madera para ocho personas y una araña de caireles que aporta brillo. Vajilla de plata y una cuidada disposición de los objetos convierten al lugar en el escenario ideal para reuniones familiares y encuentros íntimos.
Biblioteca y recuerdos
El departamento incluye también un escritorio-biblioteca decorado con muebles de estilo Luis XV que, en su momento, fueron restaurados por Daniel Tinayre, el gran amor de Mirtha. Allí se conservan libros antiguos, piezas coleccionables y objetos heredados, conformando un espacio cargado de memoria y afecto.
Espacios privados y confort
La propiedad dispone de cuatro dormitorios —uno en suite con vestidor—, además de un playroom, cocina con despensa, lavadero y habitación de servicio. El balcón cerrado, convertido en patio de invierno, suma plantas, mesas y sillas para disfrutar del aire libre con privacidad.
Cada ambiente de la residencia transmite la esencia de Mirtha Legrand: un estilo clásico, refinado y atemporal. Rodeada de arte, recuerdos familiares y objetos de valor sentimental, la conductora sigue habitando un espacio que, más que una casa, es el retrato tangible de su legado.







