EFECTO. La medida podría llevar a India a mejorar su vínculo con China.
WASHINGTON, Estados Unidos.- Los aranceles de Estados Unidos aplicados a las importaciones de India, que desde principios de mes eran del 25%, se duplicaron al 50% a partir de ayer, una forma del presidente Donald Trump de castigar a Nueva Delhi por comprar petróleo de Rusia.
India es uno de los principales importadores de petróleo ruso, después de China, y el mandatario estadounidense acusa a Nueva Delhi de ayudar a Moscú a financiar su guerra en Ucrania.
India calificó la medida como “injusta, injustificada e irrazonable, y su gremio de exportadores pidió una intervención del gobierno para aplacar el temor a una pérdida de empleos.
Con la medida, las relaciones entre Estados Unidos e India se tensan aún más, lo que da a Nueva Delhi un nuevo incentivo para mejorar sus vínculos con su rival histórico, China.
Pero el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, dijo ayer a Fox Business que Trump tenía buenas relaciones con el primer ministro indio, Narendra Modi.
“Creo que al fin y al cabo, llegaremos a un acuerdo”, dijo.
Aunque Trump ha impuesto nuevos aranceles tanto a aliados como a competidores desde que volvió a la Casa Blanca en enero, esta tarifa del 50% es una de las más altas a la que se enfrentan los socios comerciales de Estados Unidos. No obstante, persisten exenciones para sectores que podrían verse afectados por gravámenes separados, como los productos farmacéuticos y los semiconductores de las computadoras.
El gobierno de Trump ha lanzado investigaciones sobre estas y otras industrias que podrían culminar en nuevos aranceles.
Los teléfonos inteligentes también figuran en la lista de productos exentos.
Sectores que ya han sido señalados, como el acero, el aluminio y los automóviles, también se libran de estos gravámenes a nivel nacional.
Estados Unidos fue el principal destino de las exportaciones de India en 2024, con envíos por 87.300 millones de dólares.
Analistas, sin embargo, advierten que un arancel del 50% equivale a un embargo comercial y probablemente perjudique a las pequeñas empresas.
Pedidos cancelados
Los exportadores indios de textiles, mariscos y joyería reportaron la anulación de pedidos a Estados Unidos, lo que fue aprovechado por rivales como Bangladés y Vietnam, despertando temores de pérdidas de empleo.
Ajay Sahai, director general de la Federación de Organizaciones Exportadoras de India, pidió “apoyo de liquidez de parte del gobierno”.
“Queremos asegurar que, incluso si se frenan los negocios, podemos seguir pagando a los empleados”, declaró.
Ante el golpe económico, el primer ministro indio, Narendra Modi, prometió “bajar la carga tributaria sobre la gente del común”, en un discurso anual pronunciado con motivo de la Independencia.
El Ministerio de Relaciones Exteriores había declarado anteriormente que India había comenzado a importar petróleo de Rusia, en un escenario en que sus proveedores tradicionales se desviaron a Europa debido a la invasión rusa de Ucrania.
Señaló que Washington fomentó activamente estas importaciones en ese momento para reforzar la estabilidad del mercado energético mundial.
Rusia representó casi el 36% del total de las importaciones de crudo de India en 2024.
La compra de petróleo ruso supuso para Nueva Delhi un ahorro de miles de millones de dólares en costos de importación.









