¿Hay demasiados informáticos en EE.UU.? Los datos anticipan una crisis de empleo

Según el Banco de la Reserva Federal de Nueva York, la tasa de desempleo entre los recién graduados llega al 6,1%, más del doble que en carreras como biología o historia del arte, que apenas rondan el 3%.

MERCADO LABORAL. Graduados en informática en Estados Unidos enfrentan altas tasas de desempleo mientras las empresas adoptan inteligencia artificial para reducir costos MERCADO LABORAL. Graduados en informática en Estados Unidos enfrentan altas tasas de desempleo mientras las empresas adoptan inteligencia artificial para reducir costos / GOOGLE
08 Septiembre 2025

Durante años, Silicon Valley, y los ejecutivos de actores gigantes del sector como Google y Amazon prometieron que aprender programación era un pasaje directo hacia un futuro seguro. Salarios de seis cifras, bonos millonarios y oficinas llenas de beneficios definían la “época dorada” de estudiar informática. Sin embargo, según The New York Times, esa realidad cambió: muchos jóvenes graduados tienen más chances de trabajar en McDonald's que en Microsoft.

El caso de Manasi Mishra, egresada de la Universidad Purdue, se volvió viral en TikTok cuando contó que sólo la cadena de comida rápida mexicana Chipotle la había convocado para un proceso laboral. Su testimonio refleja una frustración extendida en los Estados Unidos: después de años de esfuerzo académico, los graduados de informática encuentran más trabas que oportunidades en el sector que los inspiró a estudiar.

La explosión de estudiantes y la caída de la demanda

La campaña por enseñar computación en las escuelas fue un éxito. Según la Computing Research Association, en 2024 más de 170.000 universitarios estadounidenses se especializaron en informática, el doble que una década atrás. El problema es que, mientras las aulas se llenaban, el mercado laboral empezó a achicarse.

Los despidos masivos en Amazon, Intel, Meta y Microsoft redujeron miles de puestos, mientras las empresas adoptaron con rapidez asistentes de codificación basados en inteligencia artificial capaces de generar código en segundos. Esa combinación creó un cuello de botella que golpea, sobre todo, a los recién graduados que aspiran a cargos de nivel inicial.

El Banco de la Reserva Federal de Nueva York informó que la tasa de desempleo entre egresados de informática ronda el 6,1%, y la de ingeniería informática asciende al 7,5%. Son números que duplican los de carreras como biología o historia del arte, tradicionalmente con menos salida laboral.

Una competencia filtrada por algoritmos

Las experiencias que recopila The New York Times muestran un mercado implacable. Estudiantes de universidades de prestigio como Stanford o Cornell relatan haberse postulado a cientos, incluso miles, de empleos tecnológicos sin conseguir una sola oferta. El proceso incluye evaluaciones en línea, pruebas de codificación en directo y entrevistas extensas. Aun así, la mayoría termina sin respuesta o con rechazos automáticos.

La paradoja es evidente: mientras los candidatos usan inteligencia artificial para adaptar currículums y postularse a gran escala, las compañías también aplican IA para filtrar solicitudes. Así, miles de jóvenes sienten que su futuro depende más de un algoritmo que de su talento.

Historias de frustración

Zach Taylor, de 25 años, graduado en Oregón, aplicó a más de 5.700 empleos en un año. Logró apenas 13 entrevistas y ninguna oferta. Para sobrevivir, pidió trabajo en McDonald’s y fue rechazado “por falta de experiencia”. Hoy vive con sus padres y recibe subsidios de desempleo. Su caso, citado en la crónica, se repite con matices en distintas ciudades: jóvenes desmotivados, con títulos costosos, que no logran ingresar a la industria que los convocó.

Jamie Spoeri, egresada de Georgetown, aplicó a más de 200 empleos en el gobierno y en ONGs. La congelación de contrataciones y la irrupción de la IA hicieron casi imposible su ingreso al sector. “Es desmoralizador perder oportunidades a causa de la IA”, explicó al Times.

La respuesta de las empresas y los gobiernos

Las grandes tecnológicas aseguran que la solución está en formar a los estudiantes en inteligencia artificial. Microsoft anunció inversiones de 4.000 millones de dólares en capacitación y programas educativos centrados en IA. Incluso desde la política, el presidente Donald Trump impulsó un plan nacional para integrar más jóvenes en áreas relacionadas con esta tecnología.

Pero esos anuncios no alcanzan a calmar la incertidumbre actual. La directora de la Asociación de Investigación en Informática, Tracy Camp, reconoció que los recién graduados están en desventaja porque muchas universidades recién comienzan a incluir cursos de codificación con IA en sus planes de estudio.

¿Un futuro posible o un callejón sin salida?

Los jóvenes entrevistados muestran resiliencia: algunos crean proyectos personales de software, otros exploran áreas como marketing tecnológico o ventas, donde la creatividad humana aún pesa más que los algoritmos. El propio caso de Mishra lo refleja: su faceta como influencer de belleza la llevó a conseguir un empleo en ventas de tecnología, lejos del camino clásico de programar código.

La incógnita es si este panorama marcará una nueva era de precariedad para los graduados en informática, o si se trata de una transición hacia trabajos distintos, donde la clave será dominar la IA y complementarla con habilidades humanas.

WHATSAPP ESTUDIANTES ¡Tu voz es importante para nosotros! Contanos sobre eventos en Tucumán; proponé temas para nuestros artículos o comentá lo que estuviste leyendo. Escribinos al WhatsApp Estudiantes de LA GACETA.
Tamaño texto
Comentarios
Comentarios