Luis Caputo y Javier Milei.
El presidente Javier Milei planea realizar dos viajes a Estados Unidos en un lapso de 45 días, en un intento por atraer inversiones y disminuir el riesgo país, factor que considera clave para bajar las tasas domésticas y apuntalar su programa económico.
El primer viaje, programado para principios de septiembre, se centrará en reuniones con empresarios en centros financieros como Nueva York y California. El segundo, alrededor del 23 de septiembre, coincidirá con la Asamblea General de la ONU. No obstante, una posible reunión bilateral con Donald Trump en la Casa Blanca aún no ha sido confirmada, posiblemente debido a prioridades globales como la situación en Ucrania y Medio Oriente.
En el ámbito económico interno, el ministro de Economía, Luis Caputo, se enfrenta a tensiones en el mercado de deuda en pesos. Tras una licitación en la que solo se renovó el 61% de los vencimientos a una tasa del 69,5%, el Gobierno anunció una colocación de emergencia para absorber el excedente de pesos y evitar presiones sobre el tipo de cambio. El FMI advirtió que las altas tasas de interés podrían poner en peligro el superávit financiero, un pilar fundamental del plan económico del gobierno, al aumentar el costo del servicio de la deuda.
La interconexión entre riesgo país, tasas de interés y superávit fiscal
El Gobierno considera que el riesgo país, situado en torno a los 750 puntos básicos según el índice de J.P. Morgan, dificulta el acceso a financiamiento externo a tasas competitivas. Milei manifestó que reducirlo a 550 puntos básicos es un objetivo crucial, y sus viajes a EE.UU. buscarán generar confianza entre los inversores para aliviar las tasas de interés internas, que alcanzaron el 69,5% en la última licitación.
El superávit fiscal, logrado por primera vez en 14 años, podría estar en riesgo debido al creciente costo de los intereses de la deuda, según advirtió el FMI. Esto podría obligar a realizar recortes adicionales en el gasto público o comprometer la meta de un superávit primario del 1,6% del PBI para 2025. Además, las reservas netas negativas (estimadas en U$S5.000 millones) y los próximos vencimientos de deuda añaden presión a la situación económica.
Licitación de emergencia para contener el dólar
La reciente licitación de deuda en pesos, que captó 9 billones de pesos pero dejó sin renovar 5,9 billones, reflejó la cautela del mercado ante las altas tasas de interés y la incertidumbre económica. La reducción de la deuda, impulsada en parte por la eliminación de las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI), liberó un excedente de pesos que podría generar presión sobre el mercado cambiario.
Como respuesta, el Gobierno anunció una licitación extraordinaria con el objetivo de absorber $6 billones mediante la emisión de títulos a corto plazo y el aumento de los encajes remunerados del Banco Central. Esta medida busca estabilizar el mercado cambiario, pero implica mantener altas tasas de interés, lo que podría afectar negativamente el consumo y la inversión, generando tensiones sociales.
El Gobierno considera que los viajes de Milei a EE.UU. son una estrategia clave para atraer capitales en sectores como el litio, el cobre y la energía, fortaleciendo las reservas del Banco Central y facilitando la eliminación del cepo cambiario para las empresas en 2025.






