Entre octubre y enero, técnicos de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) realizaron un relevamiento en 135 lotes comerciales, para determinar la prevalencia (porcentaje de lotes afectados) y la incidencia (porcentaje de tallos enfermos) del carbón de la caña de azúcar.
Se implementó una metodología estandarizada, delimitando cuatro sitios de muestreo por hectárea, compuestos por cuatro surcos de cinco metros lineales cada uno. En estos puntos se contaron los tallos totales y los enfermos.
La prevalencia de carbón observada en los cañaverales de Tucumán durante esta campaña alcanzó un 28,1%, lo que representa una disminución significativa, respecto de campañas anteriores. Este menor nivel de la enfermedad puede atribuirse a las condiciones climáticas predominantes. El desarrollo del carbón de la caña de azúcar requiere temperaturas cálidas (de 25° C a 30° C) y de períodos de sequía. Si bien la campaña 2024/2025 se caracterizó por presentar temperaturas medias cercanas a los 24° C, las precipitaciones registradas entre octubre y noviembre fueron superiores a los promedios históricos, lo que limitó que la enfermedad se manifieste en bajos niveles.
LCP 85-384 continúa siendo la variedad más susceptible, con una prevalencia del 66,7% y valores máximos de incidencia de carbón superiores a un 30% en los departamentos de Graneros (33%) y Burruyacu (31%). En contraste, los cultivares TUC, desarrollados por el Smgca-Eeaoc, no mostraron síntomas de la enfermedad o solo presentaron trazas en algunos lotes.







