17 Julio 2025
El sacerdote argentino Gabriel Romanelli resultó herido hoy durante un bombardeo israelí en la Franja de Gaza, que alcanzó a la iglesia católica de la Sagrada Familia, la única del enclave. El incidente generó una fuerte reacción internacional, con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, al calificar la acción militar como "inaceptable".
Según Monseñor William H. Shomali, vicario del Patriarcado para Jerusalén y Palestina, el ataque aéreo dejó siete heridos, dos de ellos en estado grave. La parroquia emitió un comunicado para confirmar que el Padre Romanelli, párroco del lugar, se encontraba entre los heridos.
"La iglesia de la Sagrada Familia de Gaza fue alcanzada por un ataque esta mañana. Hay varias personas heridas que se encontraban en el lugar, entre ellas el párroco, el padre Gabriel Romanelli", señaló el comunicado. Afortunadamente, no se reportaron víctimas mortales y la estructura de la iglesia resistió el impacto.
En el momento del ataque, la iglesia servía de refugio tanto para cristianos como para musulmanes, incluyendo niños con discapacidades, según informó Fadel Naem, director interino del Hospital Al-Ahli, donde fueron atendidos los heridos. Entre ellos se encontraban un niño discapacitado, dos mujeres y una persona de la tercera edad.
El Padre Romanelli, de 54 años, sufrió una herida en la pierna producto del bombardeo y fue hospitalizado. Su estado de salud no se considera crítico, según fuentes de la Conferencia Episcopal Italiana.
Romanelli, originario de Villa Luro, Buenos Aires, es el único argentino residente en Gaza y ha dedicado 30 años a su labor en Medio Oriente. Habla árabe con fluidez y pertenece al Instituto del Verbo Encarnado (IVE), una orden religiosa con presencia en 11 países de la región. El sacerdote solía mantener informado al fallecido Papa Francisco sobre la situación en Gaza.
Reacciones internacionales
El ataque a la iglesia escaló las tensiones internacionales. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó su condena en la plataforma X. "Los ataques contra la población civil que Israel lleva meses lanzando son inaceptables. Ninguna acción militar puede justificar tal actitud", escribió.
En respuesta, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) emitieron un comunicado. "El respeto a todas las religiones y lugares de culto es un principio fundamental para las FDI, incluso en tiempos de intensas hostilidades. Conocemos los informes sobre los daños en la iglesia católica de la Sagrada Familia en Gaza y estamos examinando el incidente cuidadosamente", dijeron.
"Para ser totalmente claros: las FDI no atacan intencionalmente lugares religiosos o civiles. En un entorno operativo extremadamente complejo, seguimos haciendo todo lo posible para evitar daños a personas no involucradas", concluyó el comunicado de las FDI.
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