
Hay pasiones que no conocen la distancia ni la edad. Las que despierta Lali Espósito responden a ambas concepciones, atravesando distintas generaciones que se convocarán esta noche en el Club Central Córdoba (avenida Alem y Bolívar) para su recital en Tucumán, o que recorrerán más de 1.200 kilómetros para volver a verla en la Capital Federal.
La historia de Evangelina Vargas está indisolublemente ligada a la de su madre Virginia Soberón, que fue quien cumplió su deseo de ir a un recital de la cantante cuando ella tenía apenas cinco años. “Fue en agosto de 2022 y vivimos un momento inolvidable”, evoca la madre, quien esta noche volverá a cumplir lo que ya es una suerte de ritual. Y no será la última vez en el año: juntas estarán en Vélez en setiembre. “Iremos solas como nunca las dos”, adelanta para LA GACETA.
El fanatismo de la niña, que hoy ya tiene ocho años y puede calificarse como la veterana más joven entre sus fans, va más allá de los shows. “En 2023 me pidió que su cumple gire alrededor de todo lo de Lali y se lo hice con esa temática. Para este show ya encargamos las remeras; ella tiene estudiadas todas las letras y la ilusión de ver a mi hija emocionarse por su estrella pop preferida es algo que a mí me llena el corazón”, reconoce.
Virginia admite que se quedó sin opción para negarse al pedido de Eva de volver a ver a la cantante, como hará hoy desde las 21 -aunque estarán varias horas antes-: “desde que se anunciaron sus shows, viene como pajarito instalándome la idea en la cabeza de seguirla cómo y dónde sea. Hoy empezaremos esta experiencia de fandom Lali, pero hace varios meses que me pide que le tome los nombres de todos sus álbumes de memoria en 30 segundos, sin repetir y sin soplar, y hace varios años que de fondo en mi casa se escucha algún estribillo de su música o algún capítulo de ‘Esperanza mía’”.
“Lali es la artista pop argentina del momento, sus shows son obras de arte en lo visual, lo estético, lo coreográfico y el despliegue de bailarines y todo lo que se aprecia en escena. Sus entradas son económicas para el promedio de un show de esa calidad y sus apuestas, tanto en vestuario como en recursos, es de origen nacional, lo cual enorgullece mucho. Sumado a eso, sus mensajes de amor, libertad y empatía emocionan a cualquiera”, reivindica.
La cantante moviliza a sus seguidores por todo el país. Así como hay quien va a Buenos Aires a verla, desde allí vienen a Tucumán siguiéndola, como es el caso de Lorena Ferreira. “Su último show siempre es el mejor y sé que la voy a pasar increíble, uno necesita esa dosis, esa vibra de vez en cuando. A quien nunca la vio en vivo, le digo que es increíble la energía que ella tiene, es impresionante como constantemente se va superando, disco a disco y show a show”, afirma.
Su visita -contra reloj porque compró el pasaje hacwe pocas horas- se concreta por la invitación de una amiga que conoció, precisamente, en un recital de Lali. Ya no sabe a cuántos fue (tanto en lugares pequeños como en grandes estadios); prefiere no llevar la cuenta: “Crecí con ella en el sentido literal, vi todo de su vida desde las series de Cris Morena donde se destacaba dentro de un elenco gigante en el que ya transmitía algo auténtico y único que te hacía seguirla; y cuando se hizo solista también estuve ahí y lo que hace me gusta. Y la voy a seguir toda la vida”.
“Lali es una artista completa, es cantante, actriz, bailarina, compositora... logra unir todo eso con su carisma, que hace que la gente la quiera, más allá del talento”, la define Lorena, mientras prepara la valija.
Experiencia única
Kikín Díaz también se asume como fan Lali, condición que lo impulsó a viajar a Buenos Aires en mayo, para estar en el primer show que dio en el estadio de Vélez Sarsfield. Y su satisfacción fue tan plena que hoy será parte de la cohorte de seguidores que concurrirán a Central Córdoba.
“Su recital fue una procesión de la 50.000 personas que llenaron el estadio esa noche para verla. Ya desde las inmediaciones se sentía una hermandad, un sentimiento compartido de todos los que estábamos por participar del recital. El clima previo al show fue como estar entre amigos, con fuerte presencia de las mujeres, madres, hijas, amigas, alguna abuela y también integrantes del colectivo Lgbtiq+”, describe, en un anticipo de lo que se podría repetir hoy en la cita tucumana.
Su gira lleva el nombre de su sexto disco de estudio, “No vayas a atender cuando el demonio llama”, y Kikín lo resalta como un giro en su carrera. “Lali presenta su trabajo más rockero, y el público va preparado para el pogo. Aunque los viejos rockeros la miren de reojo, su música sacude multitudes y nos hace saltar, bailar y cantar a los gritos. Desde el campo se cantaban canciones a capella que todo el estadio coreaba; también se hacía la ola que recorría de punta a punta el estadio José Amalfitani y en algunas tribunas se corearon cantitos dirigidos al Presidente como ‘El que no salta votó a Milei’, entre otros”, recuerda.
Como en todo ritual, que se repetirá esta noche, hay pasos y etapas. “Toda la agitación previa se detiene cuando se apagan las luces del club anunciando que ya comienza el show. Sale un grito al unísono y el corazón que se quiere escapar del pecho. Con 1,50 metro de altura pero con el poder de una bomba atómica, aparece la figura de Lali con los primeros acordes y la multitud la aclama. Una banda muy poderosa hace vibrar a cada uno de los asistentes”, describe vívidamente.
“El repertorio recorre los hits de sus últimos discos y profundiza en la experiencia rockera, dejando atrás aquellos recitales que se podían ver sentados para dar paso a la potencia de lo colectivo, a la masa que se mueve sin parar. Las baladas de discos anteriores logran emocionar y hacen que la gente cante a los gritos. Todos entramos en el mismo código y estamos viviendo la experiencia Lali a full. Y cerca del final se pudo ver a todos saltar al ritmo de ‘Fanático’ con un power inolvidable”, agrega.
Uno de los momentos más impactantes del recital de mayo fue la entrada de Moria Casán al escenario: “la One fue como invitada a la canción ‘Quienes son?’ y se sintió una onda expansiva de estas dos bombas juntas en el escenario. También al cantar el himno ‘Soy’, las pantallas se pintaron de los colores de la bandera Lgbtiq y el escenario se llenó de dragqueens y bailarines que representan a toda la diversidad”, recordó. Se espera que en su escala local haya también varias sorpresas.
“Yo voy a verla otra vez, porque es una artista a la que vimos crecer desde la televisión y las plataformas hasta convertirse en una cantante completa que pisa fuerte en la música y ser asimismo un fenómeno social, con un inmenso apoyo en redes. Recomiendo a aquellos que quieran vivir esta experiencia que ocupen las plateas, lo que permite disfrutar más tranquilos con un clima familiar. Para aquellos que quieran sentir su poder y su faceta rockera, tienen que meterse al pogo sin dudar”, concluye.
Pedidos: Lali quiere probar el sánguche de milanesa y las empanadas
Frutas, agua mineral, empanadas y un sánguche de milanesa bien tucumano forman parte de los pedidos de Lali para esta noche. Nada extravagante, pero sí con el deseo de atender las ganas culinarias de conocer el manjar local que traspasa límites con la fama de su sabor.
Remanentes: se espera un lleno completo en Central Córdoba
Las entradas para el show de la ídola pop están casi agotadas, por lo que se espera un lleno completo. Los precios de los remanentes (se descuenta que habrá reventa de quienes no puedan concurrir) van de los $20.000 a los $121.000, según la ubicación y las comodidades.
Cortes de calles: restricciones vehiculares y los horarios de los accesos
La circulación vehicular alrededor del estadio de Central Córdoba (Bolívar y avenida Alem) estará restringida desde las 17 y las puertas se abrirán a las 19: el acceso para el sector VIP será por San Luis 751, mientras que para la entrada general, por Bolívar 1.310. Se anuncia que el show comenzará puntual a las 21.
Acampe: la familia Juárez quiere ser la primera en entrar
Hace 10 días que acampan en las puertas del club, para ser los primeros en entrar y ocupar el primer lugar en el recital de esta noche. Nahuel Juárez hizo que su familia comparta su fanatismo y así se turna con Octavio, Ivana y Conrado en la vereda de San Luis al 700 para tener asegurado el espacio de privilegio. Presidente el club “Lali Tucumán FC”.
Disco y gira: el llamado del demonio que la llevará al exterior
“No vayas a atender cuando el demonio llama” es el nombre de la gira que la lleva por todo el país y que incluirá Uruguay y España (con fechas confirmadas en Barcelona, Sevilla y Madrid), para presentar su nuevo álbum lanzado recientemente, el sexto de estudio. Se lo define como un disco más rockero que los anteriores, pero manteniendo el corazón en el pop, con temas que hablan de lo prohibido, lo oscuro y lo sensual. “Más que un álbum, es una declaración artística, con una narrativa visual distópica y combativa que amplifica su mensaje y que en el escenario muestra su versión más cruda, intensa y auténtica en una experiencia catártica, emocional y sensorial”, se adelanta sobre lo que se espera para hoy.
Infaltables: el repertorio tendrá sus nuevas canciones y los clásicos
Las canciones de su nuevo disco fueron compuestas junto a Mauro de Tomasso, BB ASUL y Galán. “Popstar”, “Lokura”, “No me importa”, “Morir de amor”, “No hay héroes”, “Fanático”, “Pendeja” y “Fin de transmisión” son sus nuevas canciones, infaltables para el recital tucumano junto a sus grandes éxitos en dos décadas de trayectoria. “Mejor que vos” y “33” se desprendieron como singles de lanzamiento. Hasta este año, Lali ha ganado 100 premios en 245 nominaciones.