En el complejo tránsito que implica la menopausia, muchas mujeres enfrentan una variedad de síntomas que impactan su calidad de vida. Entre los más comunes, los sofocones, también conocidos como bochornos, figuran entre las molestias más reportadas por quienes atraviesan esta etapa. Sin embargo, recientes investigaciones nutricionales señalan que un alimento cotidiano podría convertirse en un gran aliado para mitigar estos síntomas: el tofu.
La menopausia marca el fin natural de los ciclos menstruales en las mujeres, y se diagnostica tras doce meses consecutivos sin menstruación. Generalmente ocurre entre los 40 y 50 años, aunque en algunos casos puede presentarse antes o después de ese rango etario. Esta transición fisiológica suele venir acompañada de cambios hormonales profundos, responsables de alteraciones en el sueño, el estado de ánimo, la energía general y, sobre todo, los famosos sofocos.
Un estudio publicado por el Journal of Agriculture and Food Research destaca que el tofu, producto elaborado a partir de la soja, es una excelente fuente de proteínas y compuestos bioactivos que pueden favorecer a las mujeres durante la menopausia. Este alimento contiene todos los aminoácidos esenciales, además de minerales como calcio, hierro, magnesio, fósforo, selenio, cobre, zinc y vitamina B1, nutrientes claves para la salud ósea y muscular en esta etapa de la vida.
De acuerdo con los datos aportados por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, cada 100 gramos de tofu aportan aproximadamente 83 calorías, 9,98 gramos de proteína, 1,18 gramos de carbohidratos, 1 gramo de fibra y 5,26 gramos de grasa. Su bajo contenido calórico y su alto valor nutritivo lo convierten en una opción ideal para quienes buscan mantener una alimentación equilibrada.
La clave de su eficacia frente a los sofocones reside en su alto contenido de isoflavonas, fitoestrógenos de origen vegetal cuya estructura química es similar a la del estrógeno humano. “El tofu tiene propiedades muy beneficiosas para la salud de las mujeres, especialmente en la menopausia, porque los isoflavonoides que contiene pueden actuar como un reemplazo hormonal natural”, explicó la dietista Sapna Bhalsod al diario La Nación.
Varios estudios señalan que las mujeres que consumen entre 20 y 60 gramos diarios de proteína de soja, presente en alimentos como el tofu, experimentan una notable disminución en la frecuencia e intensidad de los sofocos. Esta alternativa vegetal no solo colabora con el equilibrio hormonal, sino que además fortalece los huesos y previene la pérdida de masa muscular, dos aspectos esenciales en la salud femenina posmenopáusica.
“Este alimento ayuda a reducir el estrés oxidativo en el cuerpo, otro factor que puede influir negativamente durante la menopausia”, indicó la nutricionista Beata Rydyger para resaltar el valor antioxidante del tofu. Además, su versatilidad en la cocina permite incorporarlo fácilmente a todo tipo de preparaciones, ya sea crudo en ensaladas o salteado como parte de platos calientes, sin que su valor nutricional se vea comprometido.
Más allá de los beneficios inmediatos, el tofu también ha sido asociado con una posible reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer, como el de mama. Esto se debe a su capacidad para vincularse a los receptores de estrógeno en las células, modulando su actividad sin los efectos secundarios que podrían provocar tratamientos hormonales convencionales.