Crece el interés por el intercambio de parejas en Argentina, aunque pocos lo concretan

Según un estudio, el 37% de los argentinos fantasea con el estilo de vida swinger.

Crece el interés por el intercambio de parejas en Argentina, aunque pocos lo concretan Imagen generada con ChatGPT
03 Mayo 2025

Un reciente estudio reveló que el 37% de los argentinos fantasea con el estilo de vida swinger, aunque solo un 6% llegó a experimentarlo. La cifra, que expone un fenómeno en expansión dentro del imaginario colectivo, fue obtenida por la aplicación de citas Gleeden, en el marco del informe “Radiografía de la No Monogamia en Argentina”.

El análisis pone el foco en cómo nuevas formas de vinculación sexoafectiva comienzan a ganar espacio frente al modelo tradicional de pareja. La práctica del intercambio de parejas -conocida popularmente como “swingerismo”- aparece como una de las fantasías más comunes, seguida por las triejas, donde tres personas conforman una relación consensuada. En este último caso, el 39% expresó su deseo de vivir una experiencia de ese tipo, aunque apenas el 7% lo ha hecho.

“Lo más llamativo no es cuántas personas ya practican la no monogamia, sino cuántas más desean hacerlo. Hay un cambio profundo en marcha: el modelo tradicional ya no responde a todas las necesidades”, explicó Silvia Rúbies, directora de Comunicación de Gleeden para Latinoamérica, a Clarín.

Una comunidad pequeña, pero establecida

En paralelo, la Asociación Civil Swinger Libre Argentina (ASLA) publicó en 2024 un censo nacional que determinó que unas 1.300 personas practican el swingerismo en el país. La mayoría de ellas reside en el conurbano bonaerense (45%), seguido por la Ciudad de Buenos Aires (14%) y Mar del Plata (12%).

El 39% de quienes practican esta modalidad tiene entre 41 y 50 años, mientras que el 29% se ubica entre los 31 y los 40. El resto se reparte entre mayores de 50 y jóvenes adultos, con escasa presencia en los extremos etarios.

En cuanto a la composición de esta comunidad, el 66% son parejas, el 27% hombres solos, el 6% mujeres solas y el 1% triejas.

Glosario y códigos: el universo lingüístico del swingerismo

El mundo swinger ha desarrollado un vocabulario propio que permite identificar roles y dinámicas. Algunos de los términos más comunes son:

Unicornio: mujer sola que participa en encuentros swinger.

Single: hombre solo que acude a estos espacios.

Vainilla: persona ajena al ambiente swinger.

Evangelizar: introducir a alguien nuevo en la comunidad.

Ananá invertido: símbolo visual que indica interés o pertenencia a la comunidad swinger.

También se utilizan palabras importadas, como blizz (acuerdo sexual entre dos parejas heterosexuales), amigo horizontal (vínculo dentro del ambiente) y amigo vertical (vínculo externo).

¿Hacia una sociedad más abierta?

Los datos de Gleeden sugieren que la no monogamia está dejando de ser un tabú para instalarse como parte del imaginario de futuras relaciones. Cuando se consultó cómo creen que serán los vínculos en el futuro, solo el 16% de los encuestados sostuvo que la monogamia tradicional seguirá siendo la norma. En cambio, el 35% visualizó un escenario de diversidad vincular sin jerarquías, y un 26% cree que aumentarán los vínculos mediados por la tecnología, la autonomía afectiva o la no exclusividad.

El deseo se diversifica, y con él, las estructuras tradicionales comienzan a ceder lugar a formas más flexibles y consensuadas de vivir el afecto y el erotismo.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios