El presidente Javier Milei aseguró este jueves que la inflación va a bajar a mediados del año que viene y que “ahora es el momento de empezar a discutir el crecimiento”. También se refirió al vínculo que mantenía con el Papa Francisco.
En diálogo con El Observador, mandatario dijo: “tenemos conciencia de que hay mucho por hacer, pero lo que se hizo está fuera de los manuales en términos de logros”.
"La economía está creciendo fuerte, el último dato fue de 5,7%, pero si tomás el desestacionalizado, lo analizas y te da 10%. El primer trimestre va a estar mostrando una economía creciendo al 6%, y el segundo al 8%", aseguró.
"Argentina es un país que viene con una decadencia de más de 100 años y hablar de crecimiento económico no fue parte de la discusión, siempre estuvimos corriendo atrás del dólar y de la inflación", exhibió Milei diferenciando la situación actual de la previa.
Asimismo, explicó que la desregulación “está vinculada a un tema técnico que se llama no convexidades rendimientos crecientes”, que tiene que ver con cómo las regulaciones te matan el crecimiento.
También aseguró que “la inflación tiene fecha de defunción a mitad del año que viene. Y se va a terminar porque la política monetaria actúa con un rezago que oscila entre 18 y 24 meses. Ahora es el momento de empezar a pensar en crecer”.
Además recomendó que “no hay que ponerse ansioso” y que “hay que saber esperar” los resultados, ya que con “resultados artificiales el costo termina siendo enorme porque uno cree que avanza dos pasos, pero después termina diez atrás”.
En relación a la pobreza, Milei dijo: "bajamos 20 puntos la pobreza, sacando a 10 millones de personas de la situación de pobreza. Es obvio que quedan cosas pero lo alcanzado en el marco de un año es realmente increíble".
Sobre su relación con el Papa Francisco
Milei también se refirió al vínculo que mantenía con el líder de la Iglesia Católica y recordó una promesa que le hizo en su último encuentro. “Tuvimos una charla maravillosa, me pidió que cuidara a los vulnerables y yo me comprometí a documentarlo", contó.
“Yo creo que lo cumplí, sacamos a 10 millones de personas de la pobreza, pero no digo que el trabajo esté hecho ya”, añadió.
Y remarcó: “Le pedí perdón por mis exabruptos y eso generó un vínculo interesante. Después lo volví a ver en la reunión del G7 y tuvimos llamadas telefónicas en las que me decía: ‘Cuidame a los pobres’”.