Atlético Tucumán superó una prueba de fuego, pero se está debiendo una victoria convincente

Atlético Tucumán superó una prueba de fuego, pero se está debiendo una victoria convincente

El “Decano” revirtió la pésima imagen que había mostrado en Liniers, pero para llegar a las copas internacionales necesita dar un salto de calidad.

Foto de Matías Nápoli Escalero (especial para LA GACETA) Foto de Matías Nápoli Escalero (especial para LA GACETA)

El “efecto Vélez” parece haber quedado atrás, pero Atlético se debe una actuación y una victoria convincente, sobre todo para aspirar de modo consistente a obtener una plaza en la Copa Sudamericana.

“Sumamos de nuevo, es importante para volver a agarrar confianza… fue un golpe bastante duro contra Vélez y nos pudimos reponer”, afirmó Mateo Coronel a LG Deportiva en Banfield, minutos después del empate 0-0 frente al “Taladro”.

Para el delantero, la actuación en el Sur del Gran Buenos Aires implicó “una prueba de carácter” superada para el “Decano”. En igual sentido opinó Bruno Bianchi: “Era una prueba de fuego y la pasamos”.

Coronel, quien ante el conjunto de Julio César Falcioni tuvo un par de chances claras pero no pudo convertir, agregó: “Creo que dimos un paso adelante, tenemos que seguir avanzando, la verdad que hay muchas cosas para corregir ahora tenemos un partido complicado con Talleres de local”.

Entre el anterior partido en el José Amalfitani y este último en el Florencio Sola, lo que ya fue corregido son las desatenciones defensivas, que costaron tres goles ante Vélez. “Aquella vez no habíamos sido nosotros, ahora volvimos a las bases”, apuntó Bianchi antes de dejar Banfield.

Frente al “Taladro”, el equipo de la dupla estuvo más firme atrás y mostró algunos buenos pasajes en el juego, sobre todo en el segundo tiempo y apostado de contra. En el balance global, estuvo más cerca de marcar que el anfitrión, que contó con el arquero Facundo Cambeses como figura.

Precisamente, en conferencia de prensa, Sergio Gómez salió al cruce de una pregunta referida a las dificultades de su equipo para generar situaciones y concretarlas.

“Tuvimos varias llegadas claras, no pudimos convertir, pero hemos llegado más que en otros partidos. El equipo estuvo bien, jugó mejor, mereció ganar, no pudo, pero a veces es importante merecer, por más que no se obtengan los tres puntos”, argumentó el entrenador.

En aparente alusión a las críticas recibidas por la actuación del equipo en la derrota contra Vélez, Gómez puntualizó: “Se busca lo que no se hace, obviamente, pero hay muchas cosas que estos chicos están haciendo bien, entonces nosotros estamos tranquilos con el grupo que tenemos”.

En tanto, su compañero Favio Orsi destacó la búsqueda de la victoria hasta el final. “Muchas veces, cuando uno va a jugar de visitante por ahí la postura cuando faltan seis o siete minutos es… ‘bueno, si no se pudo ganar hasta acá, tratemos de aguantarlo’”.

“Pero no fue esa nuestra actitud. Tomás (Marchiori), en un saque de arco, cuando ya el partido se estaba terminando se apuró para tener una acción más de ataque, y eso está buenísimo. Y más en una cancha como esta, donde Banfield habitualmente se hace fuerte”.

Los entrenadores no faltaron a la verdad en sus apreciaciones, aunque también es cierto que el equipo no ha tenido actuaciones demasiado destacadas en lo que va de la Copa de la Liga.

Una de sus deudas pendientes tiene que ver con la efectividad. Con cinco goles en nueve cotejos, es el peor equipo en ese rubro en su zona.

Las lesiones de Marcelo Estigarribia y Cristian Menéndez (el Polaco recién está volviendo) y el nivel actual de Ignacio Maestro Puch dejan al “Decano” con poco peso en el área rival, más allá de la jerarquía de Coronel y las apariciones de Ramiro Ruiz Rodríguez (tampoco atraviesa su mejor momento).

Además, el aporte goleador de los volantes, en especial de Joaquín Pereyra y Ramiro Carrera, se viene dando en cuentagotas.

En parte debido a esta sequía, a Atlético se le hace difícil ganar: solo dos victorias en nueve partidos, ambas como local y por 1-0, ante dos de los equipos más modestos de la categoría: Barracas Central y Arsenal.

Tampoco perdió mucho (River y Vélez, a domicilio), pero los frecuentes empates lo han postergado a la parte baja de la Zona A, impidiéndole meterse entre los actuales clasificados a la Copa Sudamericana.

“Creo que serán vitales los partidos que nos quedan de local (Talleres, Independiente y Huracán), tenemos que tratar de sumar de a tres”, respondió Marchiori a una consulta de LG Deportiva acerca de las posibilidades reales de clasificación al torneo continental.

“Tenemos el objetivo muy cerca, pero sabemos que son cinco finales donde no podemos flaquear para que no se nos aleje el objetivo”, añadió por su parte el capitán Bianchi.

Convertir, ganar, pegar el salto: los tres verbos que precisa conjugar Atlético a la brevedad para que el año cierre feliz.

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