Filmaron un supuesto duende en un cementerio salteño

SALTA.- Una curiosa filmación en la que un supuesto duende se muestra caminando por las inmediaciones de un cementerio de la localidad salteña de General Güemes generó conmoción en los pobladores, algunos de los cuales denunciaron que en un ser similar les había arrojado piedras.

Todo se inició hace algunas semanas, cuando la noticia comenzó a ser difundida por un grupo de adolescentes -los autores del video- en la radio local. Sin embargo, los 30.000 habitantes del pueblo tomaron real conocimiento de la situación cuando las imágenes se difundieron en el canal de cable local.

El relato y la filmación aportados por los jóvenes ganaron algo de credibilidad porque dos guardabarreras habían descripto en octubre pasado una situación similar, aunque en ese caso el supuesto duende los había atacado a pedradas.

Los protagonistas del curioso relato aseguran que el incidente se produjo en una de sus habituales reuniones, en inmediaciones del cementerio Cristo Rey, en el barrio San Isidro. José, uno de ellos, indicó que alrededor de la 1, cuando comentaban su última excursión de pesca, decidió filmar a sus amigos con su celular mientras realizaban bromas.

"De pronto escuché como si alguien nos estuviera tirando piedras, miré a un costado y observé que los yuyos se movían. Pensé en un perro, pero cuando vi salir esa figura con la forma de un duende me dio mucho miedo, la filmé un poco y luego todos salimos corriendo", relató el joven.

Las imágenes, que fueron subidas al popular sitio de videos YouTube, muestran a una figura pequeña sin distinción de colores con un gorro puntiagudo y movimientos que podrían ser de un niño o un enano, que emerge de los pastizales dando saltos laterales.

Si bien los duendes abundan en la tradición europea, en especial en la cultura celta, la región norteña también tiene leyendas similares.

El duende es un ser bestial, que posee una mano de hierro y una de lana y pregunta a los desafortunados que se lo encuentran con cual de ellas prefiere ser golpeado.

Algunos dicen que el pequeño ser, que lleva un sombrero grande y llora como un niño, siempre termina golpeando con la mano de hierro, más allá de cual sea la elección de su interlocutor. Otros señalan que los desprevenidos eligen la de lana, pese a que en definitiva es la que más dolor causa.(NA)