24 Noviembre 2012
EN SOLEDAD. Viajar sin compañía sirve para conectarse con uno mismo. REUTERS
Singulares, impares, solitarios, singles... Así definen en las agencias de turismo a quienes integran un grupo creciente de viajeros que opta por lanzarse a conocer lugares sin más compañía que su equipaje. Aunque se ha ido perdiendo el miedo a estas expediciones solitarias, una de las deudas con este fenómeno es que hay poca oferta de lo "single", mucho menos con tarifas que hagan la diferencia.
Según los operadores turísticos, los viajeros solitarios siempre tuvieron un perfil similar y no son mayoría. Sin embargo, todos coinciden en que desde hace una década la cantidad de viajes de este tipo entraron en curva ascendente. ¿Qué pasó? Quienes quieren lanzarse a la aventura sin compañía tienen mucho más acceso a información gracias a internet. Y esto les da cierta seguridad.
"En el fondo, creo que se perdió el miedo a lo desconocido. Además, la mirada social también fue cambiando y ya no hay tantos prejuicios cuando alguien dice 'me voy solo'", sostiene Luciano Griet. Este deportista de 42 años se lanzó hace más de una década a conocer toda Europa durante dos meses.
"No es que la gente quiera viajar sola. Creo que hoy muchas personas, por cuestiones laborales, de tiempo o de dinero o porque está sin pareja, no encuentra a alguien que se sume a su aventura y por eso crece el turismo single", sostiene.
Los números
Una encuesta de American Express mostró que un 16% de los viajeros de norteamérica declaró que iba a salir solo en sus vacaciones, frente a un 12% del año anterior. En Argentina, no hay cifras oficiales de la cantidad de personas que se mueven sin compañia durante sus viajes. En algunas agencias de nuestra provincia, este año se ha registrado hasta un 20% de aumento de pasajeros solitarios. Internet es otro lugar donde se refleja el fenómeno: en la red aumentan en forma constante las búsquedas de "destinos solitario" y las visitas a sitios como yporquenosolo.com o viajarsolo.com.
Está comprobado que el perfil del viajero solitario es el más predispuesto a recorrer el mundo en cualquier momento. Según estudios, viajan un 39% más que la media de la población. Le dan mucha importancia al tiempo del ocio y siempre tienen la valija lista, destaca Luis Gamboa, socio gerente de una agencia de viajes.
"El problema que tiene esta gente es que siempre sale más caro viajar solo, especialmente porque no hay habitaciones singles en los hoteles y tienen que dormir en dobles abonando sólo un poco menos del precio habitual que pagan dos personas. Por eso, cuando están de acuerdo, tratamos de armarles paquetes con otro viajero que sea de su mismo perfil", detalló.
"En su mayoría, los que más viajan solos son hombres y mujeres solteros, separados, viudos, divorciados. Si bien es un fenómeno que siempre existió, se ha ido incrementando en los últimos años. Me parece que es porque ahora hay más libertad en estas cuestiones", describió el operador turístico tucumano Samuel Levy.
Los lugares preferidos
¿Qué buscan los viajeros singles? Este sector del turismo que algunos denominan 'de experiencias' busca ofertas turísticas con muchos atractivos: museos, negocios, cafés, boliches. Los jóvenes apuestan por los destinos con variada oferta de ocio nocturno, muy propicios para conocer gente nueva y hacer amigos extranjeros. Entre las mujeres, el destino favorito es Brasil en verano y Europa en invierno.
El turista single busca en el producto que contrata condiciones especiales de precio, servicio y trato. Pregunta si podrá contar con la ayuda de guías que preparan actividades de grupo. Y siempre escarba a hasta encontrar los precios más económicos para habitaciones individuales.
La tendencia a la especialización es otra de las razones que alimenta las aventuras de los solitarios. Hoy se viaja por intereses especiales: para hacer avistaje de aves, para conocer plantas medicinales, para aprender yoga o para hacer trekking, entre otras cosas. Con gustos tan específicos, los viajeros saben de antemano que van a conocer personas con intereses similares.
Otro dato que aportan en las agencias: muchos de los aventureros solitarios prefieren viajar en temporada baja, cuando pueden acceder a programas y paquetes hasta un 40% más económicos que en temporada alta. "Hoy hay mucho menos miedo a viajar solo que antes. La gente ya sabe que no es tan dramático, que no les va a pasar nada malo", dice Gamboa,
"Más vale viajar sola que mal acompañada", lanza María Cristina Muñoz, antes de comenzar a contar su historial de viajes. Esta contadora soltera de 45 años desde hace 11 veranos viaja sin compañía. Ha ido a Machu Picchu, Europa, EE. UU., el Caribe y Turquía. "Como no tengo compromisos, me tomo vacaciones cuando quiero. Siempre tengo en mente hacer algún viaje. Si hay alguna amiga que quiera venir, buenísimo. Pero si no hay, me voy nomás, no me angustia la inseguridad ni la idea de aburrirme sola. Siempre hago nuevos amigos en los viajes", dice, aunque sí reconoce que en los hoteles no hay mucha disponibilidad single y paga más caro las habitaciones.
Será por eso tal vez que para Nicolás Véliz, viajar solo es sinónimo de ir a hostels. "Es un alojamiento barato y nunca te sentís solo", señala el joven, que ha viajado por todo Latinoamérica y también ha visitado países de Europa como Francia, España y Alemania. El próximo año, este analista financiero de 27 años ya tiene un paseo en mente: ir a Rusia.
Precios para viajeros solitarios
$ 2.200 cuesta en promedio viajar solo 7 días por la costa argentina
U$S 2.000 cuesta un paquete single en crucero a Brasil o el Caribe.
$ 15.000 sale en promedio viajar 10 días por España, Francia e Italia.
$ 2.000 cuesta irse solo a conocer la Patagonia, durante cinco días.
$ 5.000 vale veranear sin compañía 10 días en playas de Brasil.
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