17 Enero 2012
REPUDIADA. Inés Pérez Concha fue difamada por internautas de toda Latinoamérica. CAPTURA DE PANTALLA
SANTIAGO, Chile.- Una mujer chilena es, desde comienzo de semana, la más odiada de las redes sociales en Latinoamérica. Se trata de Inés Pérez Concha, que ganó el repudio de la gente luego de denigrar a obreros y empleadas domésticas en una nota callejera.
"Acá la única obligación que tiene mi nana (empleada) es que, al ingresar a las 8.30 de la mañana y al retirarse a las 18, lo tiene que hacer en furgón (combi). ¿Te imaginás a todos las nanas y obreros caminando por la calle y tus hijos ahí en bicicleta?", le dijo Pérez al notero, en plena vía pública.
Según la reglamentación del condominio el Algarrobal II, un barrio privado al norte de Santiago, ningún empleado doméstico o de obra puede circular por las calles internas. Esto como medida de seguridad, por miedo a que cualquiera de ellos obtenga y comparta datos que puedan servir para pepetrar actos delictivos.
La situación fua develada por Felicita Pinto, quien trabaja para Pérez Concha desde hace años.
Las palabras de la adinerada mujer, domiciliada en el mencionado barrio, motivaron una inmensa campaña de difamación por parte de los internautas. En menos de dos horas, salieron a la luz datos como su RUT (equivalente al DNI en Argentina), correo electrónico personal y hasta su domicilio.
En Facebook se crearon diversas páginas con fotos robadas, que alojan miles de comentarios repudiando los dichos discriminatorios. En tanto que en Twitter, un bromista decidió crear una cuenta falsa para parodiar a la ahora más odiada de las redes sociales.
En la entrevista, además del polémico comentario, Inés Pérez Concha pone al descubierto la carga horaria que le exige a su empleada doméstica. Son nueve horas y media, contra las ocho reglamentadas por ley. (La Cuarta - Especial)
"Acá la única obligación que tiene mi nana (empleada) es que, al ingresar a las 8.30 de la mañana y al retirarse a las 18, lo tiene que hacer en furgón (combi). ¿Te imaginás a todos las nanas y obreros caminando por la calle y tus hijos ahí en bicicleta?", le dijo Pérez al notero, en plena vía pública.
Según la reglamentación del condominio el Algarrobal II, un barrio privado al norte de Santiago, ningún empleado doméstico o de obra puede circular por las calles internas. Esto como medida de seguridad, por miedo a que cualquiera de ellos obtenga y comparta datos que puedan servir para pepetrar actos delictivos.
La situación fua develada por Felicita Pinto, quien trabaja para Pérez Concha desde hace años.
Las palabras de la adinerada mujer, domiciliada en el mencionado barrio, motivaron una inmensa campaña de difamación por parte de los internautas. En menos de dos horas, salieron a la luz datos como su RUT (equivalente al DNI en Argentina), correo electrónico personal y hasta su domicilio.
En Facebook se crearon diversas páginas con fotos robadas, que alojan miles de comentarios repudiando los dichos discriminatorios. En tanto que en Twitter, un bromista decidió crear una cuenta falsa para parodiar a la ahora más odiada de las redes sociales.
En la entrevista, además del polémico comentario, Inés Pérez Concha pone al descubierto la carga horaria que le exige a su empleada doméstica. Son nueve horas y media, contra las ocho reglamentadas por ley. (La Cuarta - Especial)
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