Se disparó en el corazón y los médicos le salvaron la vida

CONCEPCION.- Fue un hecho que conmocionó a esta ciudad, ya que todos comentaron el milagro. Abrumado por la seria posibilidad -según dijo- de quedar sin trabajo, y por otros problemas, Ramón Antonio Vallejo, de 34 años, tomó hace unos días una drástica determinación: quitarse la vida. En el depósito de materiales de un barrio en construcción de esta ciudad, en el que estaba cumpliendo servicio, se disparó un tiro en el tórax con un revolver calibre 22.
El proyectil, con orificio de salida en la espalda, le perforó la región precordial del corazón y el pulmón izquierdo, mientras que el derecho acusó un neumotórax. La suerte de Vallejo parecía echada, ya que casi no existen antecedentes de personas que hayan sobrevivido a semejantes lesiones. Sin embargo. Vallejo se salvó.
Según los médicos que lo atendieron, fue clave la rápida intervención del sistema de emergencia del hospital regional "Miguel Belascuain" y el hecho de que sus compañeros de trabajo advirtieron lo sucedido en el momento justo. Fueron estos quienes enseguida llamaron a la guardia del nosocomio, y de inmediato llegó al lugar una ambulancia con un médico que le practicó los primeros auxilios.
En el mismo sitio del hecho, Vallejo recibió asistencia de urgencia y se lo trasladó al hospital. Allí fue sometido a una operación quirúrgica de emergencia.
"En la sala ingresó diciendo ?me estoy muriendo, hagan algo?. Luego de los estudios por imagen para verificar el alcance de la herida, que era bastante grave, se le practicó una toracotomía por un tórax agudo. La hemorragia era intensa. Una vez que se le abrió el pecho quedaron expuestas las lesiones vasculares y pulmonares", explicó el cirujano Luis Manuel Cano, que estuvo al frente de la difícil operación."Después de que se le practicó la hemostasia, o se le cerraron los vasos de sangre, y se procedió a la reparación pulmonar, el paciente fue pasado a la sala de cuidados intensivos. Ahí se recupera favorablemente. Realmente volvió a nacer ese hombre", señaló el profesional.
La cirugía, que se inició a las 8, duró un poco más de una hora y contó con la colaboración de los médicos Leónidas Paredes Chávez, Daniel Cejas, Laura Luz, Rubén López, y Lucia Ismael.
"Este hecho revela la importancia que adquiere la asistencia médica inmediata en casos de emergencia, disponiendo de los recursos humanos y tecnológicos necesarios. Así se pueden salvar muchas vidas. Nuestro hospital está en camino de lograr un nivel adecuado de atención y así lo estamos demostrando", señaló el director del hospital Luis Manuel Isa. Asimismo, el médico solicitó un tomógrafo para eficientizar su atención.
Vallejo, recuperado del trance vivido, admitió el error lo cometió "en un momento de locura", según le relató a LA GACETA cuando lo entrevistó.
El hombre, en su lecho de enfermo, recordó por qué tomó esa drástica determinación. "Andaba muy mal porque en mi trabajo no me pagan una deuda salarial desde hace mucho tiempo y además todo indica que me voy a quedar sin trabajo. Todas esas cosas me pusieron mal y cometí esa macana. Sé que estoy viviendo de milagro", dijo.
Ramón, que se recupera en la sala de terapia intensiva, es soltero y vive con su madre en el barrio Alvear de esta ciudad. "Quiero agradecer profundamente a los médicos que me atendieron por haberme salvado la vida. Ahora tengo la oportunidad de seguir adelante pese a los problemas que se nos presentan", reflexionó.
Vallejo, de acuerdo con una evaluación de profesionales, deberá ser sometido ahora a un tratamiento psicológico y psiquiátrico. "Nunca más haré lo mismo", señaló el hombre. (C)